Que no nos ganen los vándalos

Fernando Genesir

 -Hace poco, en la ciudad de Córdoba, la municipalidad recuperó la histórica Plaza Colón. Fue una inversión importante del orden de los cien millones de pesos para devolverle a la Plaza Colón todo el brillo que alguna vez tuvo. Es la única plaza considerada Monumento Histórico Nacional.

-Y por eso, después de un gran trabajo, en agosto del año pasado se reinauguró ese espacio público. Lamentablemente duró poco, porque ya grafitearon las esculturas. Esta mañana, Juan Pablo Viola contaba que parte de las obras de arte de fundición importadas de Francia a fines del siglo diecinueve ya se muestran con graffitis en algunas de las coronas romanas que coronan la fuente y en otros sectores de la plaza.

- Afortunadamente, desde la municipalidad dijeron que previendo que esta situación podía ocurrir, se le colocó una cobertura que facilita la limpieza y no genera porosidad y que obviamente van a proceder a limpiar nuevamente las esculturas. Vándalos hay en todas partes y estos hechos se repiten en distintos lugares del país y del mundo permanentemente. Hay daños en plazas pintadas, en los bancos, roturas en esculturas. El vandalismo que ha estado presente a lo largo de la historia de la civilización ha estado como una forma de tratar de borrar de la memoria un personaje o un hecho histórico para imponer un nuevo símbolo que representa una nueva era.

-No sería este el caso. Acá simplemente se trata de vándalos que destruyen lo que es el espacio público y como tal, lo que es de todos. Lo vemos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires también que está repleta de obras de arte en el espacio público con más de dos mil monumentos.

- Buenos Aires con parques y con sitios históricos donde se pueden observar esculturas de todo tipo parece un museo a cielo abierto y sin embargo, viene ocurriendo que algunos se ensañan con esas obras y así aparecen mutiladas con faltante de piezas.