Urgente alerta de la ONU: cinco pueblos indígenas colombianos enfrentan riesgo de extinción
La ONU alertó sobre la crítica situación de cinco pueblos indígenas en Colombia debido a la violencia armada y la falta de protección estatal. Estas comunidades requieren medidas inmediatas para su salvaguarda.
20/05/2025 | 12:34Redacción Cadena 3
BOGOTÁ (AP) — La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos emitió una alerta sobre el peligro de "extinción física y cultural" que corre cinco pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta, en el norte de Colombia. Esta advertencia fue realizada el martes tras la visita de Scott Campbell, representante en Colombia de ONU Derechos Humanos, quien subrayó que el riesgo es "real" y debe ser prevenido.
En su declaración, Campbell hizo un llamado al gobierno colombiano para que adopte acciones urgentes en favor de las comunidades Kogui, Wiwa, Arhuako, Kankuamo y Ette Naka, que suman más de 54.700 miembros según el censo del Departamento Administrativo Nacional de Estadística de Colombia.
Estos pueblos indígenas han sido reconocidos por la Unesco como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad, gracias a su papel esencial en la conservación del ecosistema que habitan. Sin embargo, enfrentan una creciente amenaza por parte de grupos armados ilegales que buscan controlar la región, que incluye los departamentos de Magdalena, Cesar y La Guajira, áreas estratégicas para el narcotráfico.
Campbell destacó que los pueblos indígenas sufren constantes "ataques crueles", lo que tiene consecuencias devastadoras en sus vidas, cultura y sistemas de justicia. Desde 2022, ha aumentado la violencia en la Sierra Nevada debido a disputas territoriales entre grupos criminales.
Asimismo, la ONU ha documentado una reciente masacre que dejó tres víctimas y ha recibido cinco denuncias de homicidios de defensores de derechos humanos en esta área. La respuesta del Estado colombiano ante esta situación de violencia ha sido calificada como "lamentablemente insuficiente".
A pesar de un histórico acuerdo de paz firmado en 2016 con las FARC, Colombia sigue lidiando con la influencia de múltiples grupos armados ilegales. En respuesta a esta crisis, el gobierno de Gustavo Petro implementó una política denominada “paz total”, buscando reducir la violencia a través de diálogos con diversos actores armados, aunque estas negociaciones se encuentran actualmente estancadas.
La ONU instó a los grupos armados a cesar las hostilidades y respetar los derechos humanos de las comunidades indígenas que se encuentran en situación crítica.
[Fuente: AP]




