Un penalti arruina el sueño de Palestina de llegar al Mundial 2026; brillaron en la cancha
Un polémico penalti en el último minuto frustró el sueño palestino de acceder al Mundial 2026 tras un emocionante recorrido lleno de esperanza y esfuerzo en las eliminatorias.
16/06/2025 | 01:51Redacción Cadena 3
AMÁN, Jordania (AP) — Un inspirador camino en las eliminatorias compuestas por 16 partidos y los desafíos generados por el conflicto se desmoronaron en un instante para Oday Dabbagh y su equipo palestino.
El legado de este equipo permanecerá en la memoria colectiva.
Los jugadores abandonaron el campo entre lágrimas tras el partido disputado en el Estadio Rey Abdullah II en Amán, Jordania, el jueves pasado, cuando su anhelo de debutar en un Mundial se esfumó a causa de un controvertido penalti sancionado en el tiempo adicional. Los hinchas, en estado de shock, observaron la escena.
“Es muy duro”, declaró Dabbagh, el delantero estrella, a The Associated Press. “Era vital para nosotros avanzar a la siguiente etapa: nos preparamos adecuadamente, existía un ambiente positivo, y contábamos con el respaldo de nuestros seguidores. Dimos todo, pero se desvaneció en un instante”.
El equipo, clasificado en el puesto número 101 a nivel mundial, debió ganar sus últimos tres encuentros del Grupo B para aspirar a los playoffs por los dos últimos lugares automáticos de Asia en el Mundial. En marzo, superó a Irak en Basora y a Kuwait en la Ciudad de Kuwait el 5 de junio. Solo cinco días después, estaban 1-0 arriba contra Omán en Jordania hasta el minuto 97.
Esta fue la mejor oportunidad que Palestina había tenido para clasificarse a un Mundial. Sin embargo, en la última acción del partido, un penalti permitió a Omán empatar 1-1.
Poco después de que los jugadores, visiblemente abatidos, se recuperaran, la Asociación de Fútbol de Palestina (PFA) presentó una queja oficial ante FIFA sobre la decisión del penalti. Sin embargo, esto no alteró el final del largo recorrido.
“Intentamos generar sonrisas en los rostros de los palestinos en medio de su sufrimiento”, dijo el entrenador Ihab Abujazar. “Estos heroicos jugadores son nuestro orgullo y gloria, un símbolo de todo lo hermoso de la nación palestina”.
La historia podría haber sido diferente si el equipo palestino, que se unió a FIFA en 1998, hubiera logrado jugar en casa, frente a sus aficionados en Gaza o Cisjordania durante la tercera ronda de clasificación, algo que no fue posible por el conflicto. Así, muchos de los partidos como local se llevaron a cabo en la capital jordana, Amán, donde reside una gran comunidad palestina.
“Es preferible jugar en casa”, comentó Dabbagh, quien contribuyó a la victoria de Aberdeen en la Copa de Escocia el mes pasado. “Pero las circunstancias son tan complejas que decidimos jugar en Amán, cerca de Palestina, donde contamos con el mismo público y muchos aficionados”.
No ha habido liga de fútbol local en los territorios palestinos desde que comenzó la guerra en 2023. Entre más de 55.000 víctimas del conflicto se encuentran cientos de atletas, y las instalaciones deportivas han quedado devastadas.
“Todo lo que sucede nos afecta a todos”, agregó Dabbagh. “Como jugadores, intentamos enfocarnos en el fútbol durante los partidos, pero utilizamos lo que ocurre a nuestro alrededor como motivación para llevar alegría al pueblo de Palestina”.
De los 27 jugadores de la selección nacional, 25 tienen contratos con clubes en el extranjero, un cambio notable desde el inicio del conflicto, cuando varios no pudieron abandonar Cisjordania o Gaza para cumplir con compromisos internacionales. Durante el último año, el equipo palestino se ha entrenado en Argelia, Catar y Arabia Saudí en preparación para la clasificación al Mundial.
Los dos mejores equipos de cada uno de los tres grupos asiáticos en la tercera ronda accedieron directamente al Mundial, que se celebrará el año próximo en Estados Unidos, Canadá y México. Los equipos que finalizaron en tercer y cuarto lugar en cada grupo avanzaron a un playoff por dos lugares adicionales. Una victoria aseguraba el cuarto puesto para Palestina, pero el empate de última hora los dejó un punto detrás de Omán, finalizando en quinto lugar.
En adelante, su atención deberá dirigirse a la Copa Asiática 2027, que se celebrará en Arabia Saudí, donde Palestina ya se ha clasificado. Dabbagh está preparado para demostrar que el equipo puede seguir siendo una potencia en el fútbol asiático y ser embajadores para millones de aficionados. “Usaremos el fútbol como un mensaje para mostrar al mundo que en Palestina hay más que solo conflictos. Continuaremos, el sueño no ha terminado, solo se ha retrasado”.
[Fuente: AP]