El precio es un estado de ánimo
15/07/2024 | 12:29Redacción Cadena 3
La mayoría de las veces el precio es un estado de ánimo. Un concepto intrigante pero cierto. Hay momentos en que nuestros temores nos llevan a pagar por activos que no tienen razón de ser y esto puede generar un efecto cascada.
Un ejemplo claro fue durante la crisis del dengue cuando el repelente llegó a valer más que la factura del gas o durante la pandemia cuando un barbijo llegó a valer el doble que un barril de petróleo.
Estas fluctuaciones en los precios son impulsadas por ese valor intangible: la confianza o falta de ella. La brecha cambiaria es otro ejemplo perfecto. Si continúa aumentando, distorsiona todos los precios e incita al miedo y la incertidumbre.
Pero aquí es donde entra en juego otra variable importante: el sentido común. Si ves una brecha creciente entre el dólar oficial y el paralelo, te paralizas; fomentando aún más esa suba cambiaria.
El gobierno ha tomado medidas para contrarrestar esta tendencia; anunciando su intención de vender los dólares oficiales que va comprando en vez de acumularlos en reserva. Esta decisión puede haber calmado el miedo y permitido que el mercado encuentre su valor de equilibrio.
La confianza, el equilibrio, la gestualidad son todos componentes fundamentales en este escenario económico. Al igual que en un partido de fútbol, los gestos pueden tener más peso que tu estado físico. ¿Cómo vas a buscar la pelota? ¿Cómo vas a trabar? Si te da miedo o no te da miedo.
En este caso, parece que el gobierno ha reaccionado a tiempo y ha demostrado su interés por la brecha cambiaria; dando certidumbre a ese aspecto y permitiendo que los exportadores vuelvan a vender y los importadores compren lo necesario.