Abucheos en la Feria del Libro: imprenteros y libreros no se rinden
25/04/2025 | 10:52Redacción Cadena 3

Ayer se inauguró la Feria del Libro en la Rural de Palermo y allí estuvo el Secretario de Cultura de la Nación, Leonardo Cifelli. A diferencia del año pasado, que se armó un gran alboroto, esta vez Cifelli defendió las políticas del gobierno ante un público que mostró su descontento con abucheos y gritos. El Gobierno había decidido no tener un stand oficial en la feria, lo que generó un ambiente hostil para el funcionario.
Cifelli agradeció al titular de la Fundación del Libro, Christian Rainone, quien prometió el uso de instalaciones importantes para la Feria Infantil sin costo. Sin embargo, el discurso de Cifelli fue interrumpido por constantes abucheos, lo que dejó claro que la relación entre la industria del libro y el Gobierno sigue siendo tensa.
El Secretario de Cultura ratificó que el Gobierno había cortado programas y subsidios a la industria editorial, argumentando que era necesario "ahorrar recursos". Cifelli afirmó que la inversión en cultura es prioritaria, pero los gritos del público reflejaron la frustración de una industria que se siente desprotegida.
Por segundo año consecutivo, la confrontación entre la industria del libro y el Gobierno se hace evidente. La industria reclama la restauración de subsidios que permitían la producción y venta de libros a precios accesibles. La percepción es que la industria editorial argentina se encuentra en una lucha constante por mantener su lugar en un mercado cambiante.
Los reclamos de la industria parecen centrarse en la necesidad de subsidios y medidas proteccionistas que les permitan operar con mayor facilidad. Sin embargo, la realidad es que la ley del libro en Argentina, vigente desde 2001, no evolucionó para adaptarse a las nuevas dinámicas del comercio electrónico.
La falta de presencia de la industria editorial argentina en el mercado de e-books contrasta con la vitalidad de la literatura de otros países en plataformas como Amazon. A pesar de los años de proteccionismo, la industria no logró consolidarse como una gran exportadora de libros, lo que plantea interrogantes sobre el futuro del sector.
La pelea entre emprendedores, libreros y el Gobierno se mantiene vigente, convirtiendo la Feria del Libro en un bastión de resistencia a las políticas actuales. La industria del libro enfrenta desafíos significativos que requieren una reflexión profunda sobre su modelo de negocio y su relación con el Gobierno.