La última charla de Héctor Alterio con Cadena 3: una despedida llena de verdad

1. Audio. Alterio: "Mientras pueda crear una mentira o una verdad seguiré actuando"

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Este sábado murió Héctor Alterio, uno de los actores más grandes de la historia del teatro y el cine argentino. Tenía 96 años y una trayectoria que trascendió fronteras, idiomas y generaciones. Dueño de una voz inconfundible, de una presencia escénica única y de una ética artística inclaudicable, Alterio dejó una huella profunda en la cultura nacional y universal.

Su última entrevista con Cadena 3 Argentina, junto a Rony Vargas y Agustina Vivanco, fue también una despedida íntima y sincera. Allí, el actor habló de Buenos Aires, del escenario, del público y de la vida con una lucidez conmovedora. Volvía a la ciudad después de diez años, no para quedarse, sino para “despedirse” y homenajear a ese Buenos Aires que, desde la ventana del hotel, volvía a emocionarlo.

“Llegó un momento de extrañarlo muchísimo”, confesó. Y agregó algo que atravesó toda la charla: la certeza de que el vínculo con su ciudad natal nunca se había roto. Aunque el exilio lo llevó a Europa por décadas, Alterio nunca dejó de pensarse como un actor argentino, formado en el teatro independiente, en las salas pequeñas, atendiendo boleterías de día y actuando de noche, mientras crecía una vocación que sería definitiva.

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En la entrevista recordó sus inicios, las “payasadas” juveniles, el nuevo teatro, la profundidad del oficio y las amenazas políticas que lo obligaron a irse del país. Lo contó sin victimizarse, con la serenidad de quien entendió la vida como una sucesión de realidades que hay que asumir.

A los 94 años, seguía subiendo al escenario. Cuando le preguntaron de dónde sacaba energía, respondió con una frase que hoy resuena como legado: "cuando no hay otra posibilidad, hay que estar frente a lo que está". Para Alterio, actuar no era una heroicidad sino una forma de estar en el mundo.

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Habló también del nervio previo a cada función, de la necesidad de no repetir mecánicamente lo ya hecho, de la responsabilidad frente a ese espectador anónimo que compra una entrada por primera vez. “Yo vivo de ese señor”, dijo. Y explicó que su compromiso era no defraudarlo, hacerle sentir que esas dos horas valían la pena.

Los premios, tantos como merecidos, nunca lo deslumbraron. Los relativizaba con humor y humildad. Su felicidad estaba en otra parte: en convertir una mentira en verdad, en provocar emoción, risa o silencio. En actuar.

También hubo lugar para lo íntimo: el amor por su esposa, su familia, el recuerdo de los hermanos ya fallecidos. Y, al final, una sonrisa futbolera para ratificar su identidad: Chacarita, el barrio, el club, la infancia, las plazas, la raíz.

Héctor Alterio se fue, pero su palabra queda. Su última entrevista con Cadena 3 no fue solo un testimonio: fue una clase de ética artística, de humanidad y de amor por el oficio. Un actor que entendió que el escenario no es un lugar de gloria, sino de encuentro. Y que mientras no se defraude al espectador, la conciencia puede estar tranquila.

Las mejores frases de la entrevista

Sobre Buenos Aires y el regreso

“Desde la ventana estoy viendo un pedacito de Buenos Aires que tanto me gusta.”

“Llegó un momento de extrañarlo muchísimo, Buenos Aires.”

“Cada hora que pasa, me gusta mucho más.”

Sobre el exilio y la vida lejos

“No elegí el lugar, pero tuve que estar allí: tenía hijos, familia.”

“Mi movimiento político obligó a amenazas serias. Yo estaba afuera y ahí me quedé.”

Sobre el oficio de actuar

“Soy un actor y un ser humano como todos.”

“Mi trabajo es crear una verdad a partir de una mentira.”

“Mientras yo pueda entretener a ese señor que se sienta en la butaca, tengo la conciencia tranquila.”

Sobre el teatro y el público

“Ese espectador ve la obra por primera vez; yo no puedo repetir.”

“No tiene que darse cuenta de que yo dije ‘buenos días’ 150 veces.”

“El teatro me mantiene atento, curioso.”

Sobre la edad y la vocación

"Cuando no hay otra posibilidad, se tiene que ser frente a lo que está".

"Fue mi modo de vida toda la vida".

"Todavía hoy me entretiene mucho".

Sobre los premios

"Los premios están bien, pero no me movilizan".

"Me sirven para mantener la puerta abierta cuando hay viento".

Sobre la felicidad y el sentido

"Mientras me divierta con lo que hago, no pido más nada".

"No quiero defraudar a quien paga una entrada con la que yo vivo".

Sobre la familia

"El cariño de mi mujer es fundamental".

"Todos mis hermanos murieron, yo soy el único que todavía mantiene la vida".

El cierre íntimo y porteño

"Chacarita, no se habla más".

"Yo soy actor… y de Buenos Aires".

Entrevista de Rony Vargas y Agustina Vivanco.

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