"En el parto estuvimos los tres", dijo De Gregorio

Juan de Gregorio y Maica Moraes habían agotado todas las instancias naturales y científicas para ser padres.

Al ver truncada sus expectativas frente a cada nuevo tratamiento, tomaron el ofrecimiento de una amiga de Maica que quiso ser vientre subrogante.

Finalmente el embrión con el óvulo de Maica y el espermatozoide de Juan se implantó en el útero de la amiga y después de nueve meses y algunas complicaciones al principio de la gestación, nació una beba hermosa que es la vida misma de ese trío.

Juan de Gregorio volcó toda su experiencia en el libro "La fuerza de un deseo" que presentará el martes 22 a las 19 en Dain Usina Cultural en Thames y Nicaragua, Palermo, en Buenos Aires.

En diálogo con Cadena 3, Juan De Gregorio contó que la amiga de su esposa se ofreció a ser "la casita" del bebé.

"Cuando Maica me lo contó hace un mes que su amiga se lo había ofrecido, pero ella lo tomó como una expresión de buena voluntad y hasta que nuestra amiga insistió porque anhelaba que Maica fuera mamá", dijo Juan De Gregorio.

"Cuando yo me enteré no podía creerlo. Lo que destaco es que la ayuda llega por donde uno menos espera", agregó.

Juan contó que cuando apenas su amiga quedó embarazada, comenzó a tener pérdidas.

"Nuestra amiga en el primer intento quedó embarazada, y cuando comenzaron las pérdidas, Maica se instaló en la casa de ella: le preparaba la comida y le limpiaba la casa", contó Juan De Gregorio.

Juan también hace un alto en su relato cuando se refiere a Pepe, el médico que atendió el parto.

"Hablo de él y me emociono", dijo De Gregorio.

"En el parto estuvimos los tres, fue toda una logística", agregó.

"Entró nuestra amiga y Maica y un segundo antes que naciera me llamaron y me dijeron: 'pasá ahora'", dijo.

"Cuando pasé justo estaba saliendo la cabecita de nuestra beba", contó Juan con la voz totalmente quebrada por la emoción.

Como en Argentina no existe legislación sobre el vientre subrogante, la beba fue anotada como hija de la amiga de Maica.

"Recurrimos a una abogada muy corajuda, Fabiana Quaini, e hicimos una presentación en la Justicia y luego de presentar un recurso de hábeas data, pudimos anotar nuestra hija como propia y ya tiene su documento", contó Juan.

También se hicieron los exámenes de ADN que demostraron que la pequeña es hija biológica de Juan y Maica.

Es el primer fallo judicial sobre "maternidad subrogada" en la Argentina, antes de que esta figura se incorpore al nuevo Código Civil, que aún espera por ser aprobado.

La amiga de Juan y Maica tiene dos hijos, de 18 y 20 años.

"Antes decíamos que era una tía para nuestra hijta, pero es mucho más que eso, es alguien muy importante".

"Es una parte fundamental de la vida de nuestra hijita", señaló.

Juan y Maica abrieron un perfil en Facebook para ayudar a parejas que busquen tener hijos y no puedan (www.facebook.com/lafuerzadeundeseo).

"Queremos estar para compartir experiencias, escucharlos y ayudarlos", expresó Juan.

"La fuerza de un deseo es un espejo donde mirarse" , indicó.

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