Opositores piden que el reclamo por el 8N sea escuchado

Los principales referentes de la oposición coincidieron en que el mensaje del 8N fue dirigido a la presidente Cristina Kirchner y en que la mandataria "escuche el reclamo" de la sociedad.

El jefe de Gobierno Porteño Mauricio Macri, expresó que "lo que hizo el pueblo argentino ayer fue para emocionarse".

Dijo estar "muy contento" por la multitudinaria protesta y enfatizó el pedido para que la Presidenta "escuche".

"Lo que hizo el pueblo argentino merece orgullo. Se ha movilizado como nunca antes en la historia y lo hizo demostrando que hay una Argentina y una energía positiva impresionante", señaló Macri.

Asimismo, el líder del Pro consideró: “Ayer hemos tenido más de 2 millones de personas en todo el país movilizadas y si no escuchan la próxima va haber 5 millones”.

Por su parte, el analista político Rosendo Fraga comentó que si no hay posibilidades de re reelección la figura clave es la del gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli.

“En la medida que se siga haciendo más compleja la re reelección, después del compromiso de la oposición el Congreso y el 8N la reforma, la candidatura de Scioli va a ir emergiendo sin que él haga nada”, evaluó.

También gobernadores reflexionaron sobre la multitudinaria manifestación. "Hay que tratar de encontrar consensos. Cuando no se escucha los reclamos de la gente se puede volver un boomerang", advirtió el mandatario de Santa Fe, Antonio Bonfatti.

El ex vicepresidente de la Nación, Julio Cobos, no participó de ninguna marcha y justificó su ausencia: "No fui porque considero ha sido producto de una sociedad que ha sabido interrelacionarse y expresarse. No hay que mezclar las cosas".

Al igual que el resto de los dirigentes políticos, señaló que "ahora habrá que ver si esto se traduce en un acuse de recibo" por parte del Gobierno nacional.

Sin embargo, no se mostró optimista al respecto, y en referencia recordó: "Ya pasó el cacerolazo del 13 de septiembre y nada cambió".

Alberto Fernández fue otro de los dirigentes políticos que opinaron y consideraron que "para el Gobierno fue un gran llamado de atención".

El ex funcionario kirchnerista reconoció que los manifestantes "no tienen liderazgo" y coincidió que "el problema es que no se encuentran respuestas por parte del Gobierno".

"La democracia es votar cada dos años, pero además es tolerar la crítica. Quisiera que el Gobierno tome en cuenta de lo que pasó", resaltó.

Los diputados nacionales Mario Negri (UCR), Gustavo Ferrari (Frente Peronista) y hablaron con Cadena 3 sobre el significado del 8N para el Gobierno y para la clase política en general. También se sumaron las voces de Fernando "Pino" Solanas, Julio Bárbaro y Eduardo Mondino.

Mario Negri: "Esto fue multiplicado por tres o por cuatro lo del 13 de setiembre. En aquel primer llamado de atención de una protesta social el Gobierno actuó en el sentido contrario, sordo y enojado".

"En cualquier lugar del mundo si cerca de un millón de personas caminando por las calles en paz, un primer ministro o un presidente responden a ese reclamo".

"Ojalá que la respuesta no sea la sordera ni el enojo", dijo Negri.

"Los opositores también deben decodificar cuáles son las demandas", apuntó el diputado nacional y advirtió que la "construcción de una alternativa, requiere atender las demandas de la gente".

Gustavo Ferrari, del Frente Peronista: "Obviamente la ciudadanía está hablando más fuerte que la política".

"La imputación es al Gobierno porque es el que tiene las herramientas para promover cambios", dijo Ferrari pero señaló también que la oposición "tiene que recibir este mensaje claro por parte de la ciudadanía".

Dijo que por falta de mayoría en el Congreso "no puede resolver estos reclamos, pero tiene que ofrecer alternativas electorales".

Julio Bárbaro, dirigente peronista. "Esto es un cambio en la democracia argentina. El Gobierno es el primer gestor del 8N".

"Hay una sociedad que pega un alarido y dice esto son nuestros límites", indicó Bárbaro.

"Falta madurez del Gobierno para asimilar este golpe", indicó el peronista histórico y consideró que "la realidad pegó una piña a la política".

Fernando "Pino" Solanas Proyecto Sur. "Vi una extraordinaria explosión ciudadana. Hace años que no veía algo tan grande".

"Guste o no le guste, nadie puede negar que esto es una expresión de civilidad. Es una manifestación popular heterogénea ", destacó Solanas.

Pino criticó los "intentos de algunos partidos de querer capitalizar" la movilización.

El cineasta destacó que había entre los concurrentes, "grandes capas medias, también trabajadores, estudiantes, jubilados y mucha juventud".

"Se protesta por cosas muy simples: la mentira reiterada, la inflación y que se come con 6 pesos", dijo Pino y agregó: "También por los intentos de perpetuarse, los aprietes institucionales, la corrupción y la falta de seguridad".

Eduardo Mondino, ex Defensor del Pueblo."Fue una manifestación popular genuina. Una de las más importantes desde el regreso de la democracia".

"Fue un mensaje muy claro que no buscaba representación política para cambiar el Gobierno", dijo Mondino.

"La gente está harta del maltrato y autoritarismo del Gobierno", indicó.

"El Gobierno tiene dos opciones, representar a esos ciudadanos, o irá a una situación que generará más división cuando la misión de un Gobierno es unir", indicó Mondino.

Asimismo señaló: "Cuando alguien va por todo termina yendo por uno mismo".

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