EEUU repatrió en avión a Honduras y Colombia a los primeros migrantes que eligen regresar voluntariamente
Un grupo de 68 migrantes, incluidos 38 hondureños, fue reubicado en su país bajo una iniciativa de EEUU. Aseguran que la situación en EEUU es insostenible.
19/05/2025 | 22:16Redacción Cadena 3
SAN PEDRO SULA, Honduras (AP) — "Quería ver a mi familia y a mi mamá", manifestó Kevin Antonio Posadas, de 25 años, después de entregarse a las autoridades de Estados Unidos y firmar su deportación voluntaria.
Él forma parte de un primer grupo de 68 migrantes, donde 38 son hondureños, que retornaron el lunes de forma voluntaria a su país mediante el programa estadounidense CBP Home, que incentiva a los migrantes indocumentados a "autodeportarse" a cambio de una ayuda económica de 1.000 dólares y la posibilidad de solicitar en el futuro una visa para entrar a Estados Unidos legalmente.
Los migrantes arribaron en un vuelo chárter al aeropuerto de San Pedro Sula, a 250 kilómetros de la capital Tegucigalpa, junto a 26 nacionales colombianos que también continuarían su viaje de regreso, según un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional de EEUU emitido el lunes.
"Llené la aplicación CBP Home y en tres días ya la tienes", explicó Posadas a The Associated Press. Originario de Tegucigalpa, residía desde hace tres años en Houston, Texas, donde vivía con su padre y hermanos, y comenzó a considerar el retorno voluntario tras escuchar el anuncio del gobierno de Donald Trump. "Yo me iba a venir aparte, pero cubre todos los gastos", admitió respecto al programa que le evitó el costo del pasaje de avión.
El presidente estadounidense, prometió deportaciones masivas de migrantes al asumir el cargo y comenzó a implementar un programa que fomenta los regresos voluntarios al ofrecer 1.000 dólares —los cuales los migrantes reciben en una tarjeta de débito— si se presentan ante las autoridades con la intención de ser deportados, para evitar ser atrapados en las redadas realizadas por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
En las últimas semanas, la administración de Trump ha intensificado su política contra la migración ilegal, así como las noticias sobre deportaciones de migrantes, entre ellos más de 200 venezolanos que fueron enviados a El Salvador y recluidos en una cárcel de máxima seguridad.
En el comunicado emitido el lunes, la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kristi Noem, instó a los migrantes a solicitar su deportación voluntaria para beneficiarse de esos incentivos y advirtió que, en caso contrario, "serán objeto de multas, arresto, deportación y no se les permitirá regresar".
Posadas también mencionó la alternativa de optar en el futuro por una visa. "Todavía el gobierno de Estados Unidos no ha dicho nada, pero cuando esté lista vamos a ver si aplicamos para regresar de forma legal", apuntó.
En Honduras, el gobierno recibió a sus nacionales deportados con un programa propio de apoyo financiero. El vicecanciller hondureño, Antonio García, explicó en una conferencia de prensa que los 38 migrantes recibieron 100 dólares en efectivo y un bono de 200 dólares de la Suplidora Nacional de Productos Básicos (Banasupro), un comercio estatal que ofrece productos de primera necesidad.
El funcionario destacó que entre los deportados había 19 niños, incluyendo cuatro que nacieron en Estados Unidos y uno en México, pero de padres hondureños.
Por otro lado, García aclaró que el incentivo de 1.000 dólares de Estados Unidos es por persona, incluyendo los niños. Así, si una madre regresó con sus tres hijos, se les entregaron 4.000 dólares. "El dinero se les asignó a través de una tarjeta bancaria de débito" que pueden retirar en cualquier cajero automático.
Los migrantes expresaron que la situación en Estados Unidos para los indocumentados es complicada, afirmando que existe un ambiente hostil y manifestó temor por salir a trabajar o a comer afuera.
Wilson Paz, director de Migración, comentó que de los 38 migrantes deportados, muchos dejaron una vida estable en Estados Unidos, pero decidieron regresar a Honduras voluntariamente, algunos con su núcleo familiar y otros de forma individual.
En lo que va del 2025, alrededor de 13.500 migrantes han sido deportados de Estados Unidos, mientras que durante el mismo periodo del 2024 ya superaban los 15.000. “Estamos viendo una disminución a pesar de un entorno migratorio complicado”, declaró.
Paz no cree que el programa CBP Home incremente significativamente el número de deportaciones, aunque algunas personas podrían optar por aplicar debido a que consideran que su ciclo en Estados Unidos ha terminado o porque el clima no es favorable para trabajar.
“Esas variables son comunes y no considero que sean miles las personas que apliquen al programa. Lo que buscamos es que el regreso sea ordenado y así podamos brindarles apoyo”, concluyó.
[Fuente: AP]




