Karen Reichardt, de Brigada Cola a La Libertad Avanza
08/10/2025 | 17:43Redacción Cadena 3
FOTO: Karen Reichardt, de la televisión a la política.
Conocida como Karen Reichardt, Karina Celia Vázquez se hizo conocida figura de la televisión y el cine de los ’90.
Ahora, dio un inesperado salto a la política de la mano de La Libertad Avanza, y se encuentra en el centro de una disputa electoral que atraviesa a la coalición libertaria.
Su ingreso a la política no fue producto de una carrera tradicional ni de un recorrido partidario habitual, sino gracias al apoyo y la influencia de Javier Milei, líder indiscutido de este espacio.
Sin embargo, lo que parecía un camino allanado se complica ahora con la incertidumbre sobre cómo hacer que Diego Santilli sea el primer candidato, por lo que Reichardt emerge como una figura clave después de que José Luis Espert se bajó por sus vínculos con el narco “Fred” Machado.
Reichardt inició su carrera artística a finales de los ’80 con televisión y programas que combinaron humor y parodia.
Logró una fuerte exposición mediática y una estética provocadora que la diferenciaron en aquella época.
De hecho, fue tapa de varias revistas de gran circulación en la época.
Su paso por programas como Peor es Nada, así como su trabajo en cine popular, en Brigada Cola, le dieron notoriedad que supo capitalizar durante años.
También se animó a la conducción de un programa dedicado al fútbol femenino.
Pero la transición de las cámaras a la política parecía lejana, hasta que en los últimos años Reichardt se volcó hacia el activismo animal con un programa sobre adopción responsable, y comenzó a mostrarse más activa en redes sociales respaldando públicamente a Milei y a referentes libertarios.
Su frase, “Fue el mejor voto de mi vida. Cada día me levanto con esperanza”, refleja su compromiso ideológico y su identificación con este movimiento.
Con dos hijos fuera del foco público, Karen enfrenta ahora este nuevo desafío: convertirse en la principal representante de La Libertad Avanza en Buenos Aires.
Esta situación pone en tensión la coalición, que aún no define con claridad cómo alcanzar sus objetivos electorales con Diego Santilli, mientras su notoria figura se convierte en posible cabeza de lista legislativa.
De actriz y modelo a posible diputada nacional, Reichardt personifica una irrupción inesperada pero simbólica: la cultura popular se mezcla con la política, y la visibilidad mediática se transforma en capital político en un escenario donde los liderazgos y las estrategias están en plena redefinición.
