Minerales críticos, clave en la ventaja comercial de China con Estados Unidos
China ha utilizado su dominio sobre los minerales críticos para influir en las negociaciones comerciales con Estados Unidos. Este control impacta sectores clave como la tecnología y la defensa.
12/06/2025 | 03:17Redacción Cadena 3
GANZHOU, China (AP) — La preeminencia de China en el ámbito de los minerales críticos se configuró como un potente instrumento en las negociaciones comerciales entre Beijing y Washington, culminando en un acuerdo que ambas partes consideran como un paso hacia una colaboración más amplia.
Desde hace décadas, China ha erigido la más sobresaliente cadena industrial mundial dedicada a la minería y el procesamiento de estos recursos, esenciales en múltiples sectores como la electrónica, la manufactura avanzada, la industria de defensa y el ámbito de la salud.
Las minas y plantas situadas en y alrededor de Ganzhou, centro neurálgico en la producción de tierras raras, son el pilar del control que ejerce China sobre estos minerales. Muchos pobladores locales crecieron recolectando rocas que albergan estos valiosos recursos en las colinas que rodean la ciudad, y actualmente tienen como medio de vida su extracción, comercio o procesamiento.
En respuesta a unos aranceles en constante aumento y otras restricciones sobre tecnologías avanzadas, China comunicó a sus exportadores de tierras raras y otros minerales críticos que debían obtener licencias para cada envío al exterior, generando demoras que afectan la cadena de suministro de Estados Unidos y otros países.
El expresidente Donald Trump afirmó que China facilitaría el acceso a imanes y minerales de tierras raras a la industria estadounidense, un movimiento considerado crucial para que prosigan las negociaciones entre las dos potencias económicas. A cambio, se detendrían los intentos de revocar las visas a estudiantes chinos en universidades de EE.UU.
Sin embargo, los detalles específicos del acuerdo siguen siendo difusos. Pekín no ha confirmado el contenido de las conversaciones, y la aprobación final tanto del presidente chino, Xi Jinping, como de Trump sigue pendiente.
El Ministerio de Comercio de China reveló que se habían autorizado un “número determinado” de licencias de exportación para productos de tierras raras, sugiriendo cierta respuesta a la solicitud personal de Trump a Xi durante una conversación telefónica reciente. JL MAG Rare-Earth Co., uno de los conglomerados de tierras raras en Ganzhou, también confirmó la obtención de licencias para exportaciones a varios destinos, incluidos Estados Unidos y Europa.
No obstante, expertos advierten que es poco probable que Pekín elimine el sistema de permisos que controla el acceso a estos recursos. La única vía para una posible desregulación dependería de que EE.UU. eliminara los aranceles impuestos a productos chinos en el marco de la guerra comercial, sostiene Wang Yiwei, profesor de asuntos internacionales de la Universidad Renmin.
En 1992, Deng Xiaoping anunció que mientras Oriente Medio poseía el petróleo, China contaba con tierras raras, marcando el interés del país en acceder a estos minerales críticos. Hoy, China mantiene un monopolio sobre las tierras raras pesadas, imprescindibles para la fabricación de imanes utilizados en industrias estratégicas como la defensa y los vehículos eléctricos.
Aun así, la dependencia de los proveedores chinos se volvió preocupante para varios países tras el embargo de tierras raras a Japón en 2010, que motivó a este último a invertir en plantas de procesamiento en otras naciones. Recientemente, algunas fabricantes automotrices en Europa se vieron forzadas a cerrar líneas de producción debido a demoras en el suministro de tierras raras, mientras que Elon Musk, CEO de Tesla, comunicó que la escasez de estos recursos afecta los desarrollos tecnológicos de su empresa.
A pesar de los desafíos, los mineros en Ganzhou expresaron su angustia por el agotamiento de los recursos. Zhong, un gerente de una fábrica de tungsteno, mencionó que el acceso a este mineral se vuelve cada vez más complicado. Su planta ha comenzado a importar materias primas de países lejanos a raíz del agotamiento de los recursos locales.
Los datos indican que entre 2020 y 2023, Estados Unidos importó más del 70% de sus compuestos de tierras raras desde China. Tener una mina de tierras raras operativa en California no fue suficiente, ya que esta envía su mineral a China para el procesamiento. La construcción de instalaciones para separar tierras raras en EE.UU. es un proyecto que podría demorar años.
En este contexto, la presión sobre los minerales críticos podría abrir oportunidades para los mineros más pequeños, especialmente en la extracción de tungsteno, que aunque se necesita en cantidades pequeñas, es esencial para sectores clave. El futuro del comercio de minerales críticos seguirá dependiendo de la relación entre EE.UU. y China y de cómo estas naciones manejen sus respectivas políticas comerciales.
[Fuente: AP]




