Líderes religiosos en Estados Unidos proponen resistencia no violenta contra redadas migratorias
Frente a las duras políticas migratorias de Trump, líderes religiosos en EE.UU. promueven manifestaciones pacíficas como única vía hacia el cambio y exigen respeto a los derechos de inmigrantes.
12/06/2025 | 21:24Redacción Cadena 3
El reverendo Edward Anderson se convirtió esta semana en una figura emblemática al manifestarse en Los Ángeles, desafiando las crecientes redadas migratorias ordenadas por la administración del presidente Donald Trump. Durante la protesta, se posicionó como un escudo humano entre los agentes policiales y los manifestantes, cumpliendo así con su convicción moral de oponerse a la injusticia de manera pacífica.
Anderson, líder de la iglesia cristiana McCarty Memorial, manifestó que es vital que la comunidad de fe alce su voz, advirtiendo que el silencio ante la injusticia se traduce en complicidad. Este reclamo es respaldado por un grupo diverso de líderes religiosos que se han manifestado en contra de las estrictas políticas migratorias, algunos incluso citando textos sagrados para justificar su postura, tanto a favor como en contra de estas medidas. Para quienes critican la detención y deportación de inmigrantes sin autorización, la resistencia pacífica se erige como la única vía efectiva hacia un cambio positivo.
Funcionarios electos y activistas han denunciado el aumento de tensiones por parte del gobierno, especialmente después del despliegue de la Guardia Nacional en respuesta a las manifestaciones, que han ocurrido diariamente desde la semana pasada. Mientras muchas de estas protestas mantuvieron un tono pacífico, se reportaron enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, instó a los participantes a que se mantuvieran pacíficos, enfatizando que la violencia solo complicaría el proceso de cambio.
El mensaje del liderazgo religioso resuena en este contexto; la rabina Sharon Brous destacó en una vigilia que la respuesta a la cruel realidad del presente debe ser un acto de valentía, enfrentando el odio con amor. La reverenda Jacqui Lewis, líder de la iglesia Middle Collegiate en Nueva York, enfatizó que la no violencia es fundamental, subrayando que esta posiciona a quienes predican el amor por encima de la violencia.
Aún así, Lewis advierte que la resistencia no violenta no implica permanecer en silencio; en su opinión, confrontar la verdad es también un acto de valentía. Su congregación se alista para participar en una manifestación nacional el sábado denominada “Sin Reyes”, que tendrá lugar simultáneamente con un desfile militar en Washington, en protesta a las políticas de Trump.
A lo largo de la historia estadounidense, la no violencia ha probado su efectividad, desde el legado del reverendo Martin Luther King en el movimiento por los derechos civiles. Sin embargo, Michael Nagler, cofundador de The Metta Center for Nonviolence, advirtió que este enfoque implica sufrimiento y sacrificio. Aseguró que el fundamento de la no violencia se asienta en la creencia de que cada vida tiene un valor intrínseco y que siempre es posible alcanzar soluciones que respeten las necesidades de todas las partes.
Nagler también mencionó que, aunque la no violencia no produzca resultados inmediatos, a largo plazo su impacto es más profundo y genera menos víctimas que alternativas más agresivas. En el contexto actual, lograr que el gobierno trate a los inmigrantes con más humanidad representaría una victoria significativa.
El reverendo Paul Brandeis Raushenbush, presidente de la Interfaith Alliance, consideró que los líderes religiosos desempeñan un papel esencial en estas manifestaciones, brindando protección y fuerza espiritual a los que protestan. La iglesia de Anderson, en colaboración con organizaciones comunitarias, ha encabezado vigilias y ha ayudado a los migrantes a conocer sus derechos, estableciendo la importancia de la no violencia en sus acciones.
A pesar de la oposición de ciertos líderes, algunos de los cuales justifican las acciones de Trump, el consenso entre muchos es que la intervención humanitaria y la defensa de los derechos de los inmigrantes son esenciales. La arquidiócesis de Los Ángeles se comprometió a continuar con su rol en las vigilias interreligiosas, promoviendo que comunidades de distintas creencias se unan por un futuro más esperanzador.
El sacerdote budista Seth Zuiho Segall también aboga por un enfoque no violento, enfatizando que el mensaje del no odio es intrínseco a su fe. Así, en medio de la polarización, líderes de diversas tradiciones religiosas se esfuerzan por construir un frente común por la dignidad y el respeto a cada persona.
[Fuente: AP]




