Aclaran que Bergoglio no inició el pedido de beatificación

La primera causa de beatificación del papa Francisco sería la de Carlos de Dios Murias, un joven sacerdote cordobés torturado y asesinado por la última dictadura, en la provincia de La Rioja.

El fray Carlos Trovarelli, quien es el superior de los franciscanos conventuales en Argentina aclaró a Cadena 3 que “el proceso no fue iniciado por el cardenal Bergoglio sino por la Diócesis de la provincia de La Rioja", donde fueron asesinados.

Sobre los procedimientos en este tipo de casos explicó que “para que se abra la investigación diocesana sobre el presunto martirio de los ciervos de Dios hacen faltas pasos previos que fueron dados. Entre ellos, estuvo un beneplácito de Bergoglio como presidente del Episcopado argentino”.

“En el 2007 aprobamos impulsar la causa y presentamos esto al obispo, Roberto Rodríguez, de La Rioja quien aceptó y procuró todo lo necesario para que esto fuera”, dijo.

"Se debe armar una carpeta con la presentación global que es enviada en primer lugar a dos o tres teólogos, de los que no se conoce el nombre, quienes dan un primer veredicto para ver si puede ser presentado como causa. El segundo lugar es a la Conferencia Episcopal, donde los obispos dan el beneplácito, y el tercer lugar es a la Sagrada Congregación –en Roma– donde deben decir que se puede empezar el proceso de investigación”, explicó.

Finalmente explicó que “se debe probar que murieron por la fe y caridad cristiana”.

La posible beatificación fue confirmada ayer a Cadena 3 por el periodista del diario La Stampa Paolo Mastrolilli. “El cardenal firmó el papel en mayo de 2011”, dijo y agregó que el padre Carlos Trovarelli le contó que “ese era un deseo" del ahora ex arzobispo de Buenos Aires.

“Es la esperanza que sea la primera beatificación. Hay otros procesos pero muchos entienden que este es muy importante para Francisco”, añadió.

Quién fue el sacerdote asesinado

Carlos de Dios Murias nació en 1945 en Córdoba. Luego de una carrera militar, ingresó al seminario y posteriormente fue ordenado sacerdote por Enrique Angelelli, el obispo militante de La Rioja, famoso por su cuidado pastoral de campesinos.

Murias fue enviado para ayudar a los agricultores en un pequeño pueblo llamado El Chamical, junto con el francés sacerdote Gabriel Longueville.

Pero ya con los militares en el poder, comenzó a recibir avisos, citaciones en los cuarteles donde los soldados le advertían: "No es la Iglesia en la que creemos."

El 18 de julio de 1976, fueron alevosamente asesinados, luego de ser secuestrados por quienes se identificaron como miembros de la Policía Federal.

Tan pronto como la diócesis de La Rioja comenzó los trámites para practicar la canonización, Bergoglio firmó inmediatamente la documentación. Era mayo de 2011, cuando nadie sospechaba que dos años después iba a ser Papa.