Impacto de los ingresos por NIL en la evolución del draft de la NBA

Will Wade, entrenador de N.C. State, trabajó arduamente para formar un equipo competitivo, buscando talentos que se declararan para el Draft de la NBA a la espera de que regresaran a la universidad. Este método no representa un gran riesgo, considerando el flujo de dinero que entró en la universidad. Este año, el draft presenta la menor cantidad de prospectos anticipados en más de una década.

Wade comentó a la Associated Press: "Ahora puedes pensar en el futuro a más largo plazo. Puedo ganar una cantidad similar a lo que recibiría en la G League o en un contrato por dos vías, y algunos jugadores están recibiendo pagos como si fueran seleccionados en la primera ronda".

Desde que los atletas universitarios comenzaron a explotar sus derechos de nombre, imagen y semejanza (NIL), cuatro años atrás, se permitió la compensación que anteriormente estaba prohibida por las regulaciones de la NCAA.

El 1 de julio marca el inicio de un nuevo reparto de ingresos que permite a las universidades pagar directamente a los atletas, tras un acuerdo antimonopolio histórico.

Wade firmó a Darrion Williams de Texas Tech después de que este se retiró del draft, lo que resalta un cambio en la estrategia de los jugadores universitarios.

El nuevo proceso de evaluación está cambiando las dinámicas del draft. Los jugadores que se declaran pero no son elegidos en las primeras posiciones sufren un dilema: pueden ganar casi lo mismo quedándose en la universidad. Como indicó Wade, esto refleja un cambio notable en la cultura del baloncesto universitario en la era post-pandemia.

La situación se evidencia en los números. Este año, 82 jugadores se registraron como prospectos anticipados, un 49% menos en comparación con el año anterior y un 47% menos que el promedio de cuatro años entre 2016 y 2019. Además, sólo 32 se mantuvieron tras la fecha límite de retiro.

Los cambios en las decisiones de los jugadores universitarios también afectan a la NBA. Jon Scheyer, entrenador de Duke, describió el pago a los atletas universitarios como un “cambio esencial”.

Por su parte, Trajan Langdon, presidente de operaciones de baloncesto de los Pistons de Detroit, destacó la reducción en el número de jugadores que se declaran y la complejidad que esto supone para los equipos que buscan talento durante el draft.

Los jugadores actuales, como Thomas Bryant y Isaiah Hartenstein, también han comentado estas nuevas circunstancias. Llevar su experiencia al contexto de una NCAA donde ahora hay opciones lucrativas para los atletas podría haber cambiado sus trayectorias profesionales.

La compensación universitaria está influyendo en la toma de decisiones, y los jugadores parecen evaluar con más detenimiento sus opciones. El entorno del baloncesto está experimentando una transformación significativa, mostrando claramente los efectos positivos y negativos del NIL en el futuro de los atletas.