Dolton, la cuna del papa León XIV, aprueba compra de su casa para revitalizar la zona

CHICAGO (AP) — La localidad de Dolton, donde nació el papa León XIV, decidió comprar su casa de la infancia tras una votación unánime de la junta comunitaria el pasado martes. La adquisición busca revitalizar una zona que ha enfrentado serios problemas financieros.

Desde que salió el humo blanco de la Capilla Sixtina en mayo, marcando la elección del papa León XIV como sucesor del papa Francisco, la casa de la infancia del nuevo papa, ubicada en Dolton, Illinois, ha comenzado a atraer visitantes de todo el país, quienes consideran el lugar como un sitio de peregrinación.

Robert Prevost, quien se convirtió en el primer papa estadounidense, causó revuelo en Chicago, donde la comunidad celebró su ascenso al papado acudiendo a las iglesias y compartiendo memes en redes sociales.

Prevost, nacido en 1955 en Bronzeville, Chicago, creció en el suburbio de Dolton, donde realizó su infancia cerca de la iglesia Santa María de la Asunción y cursó la escuela primaria. Posteriormente, continuó su formación teológica en la Unión Teológica Católica de Chicago.

Durante la reunión de la junta comunitaria, el alcalde de Dolton, Jason House, subrayó que esta compra representa una “oportunidad única en la vida”. A menudo, las casas de infancia de figuras como los papas se convierten en museos o en destinos de peregrinación, lo que puede traer beneficios a la comunidad.

Sin embargo, la decisión generó escepticismo entre los residentes, quienes cuestionaron si la localidad podría costear la compra y el mantenimiento de las calles circundantes, dado el contexto financiero complicado que enfrenta. Junto a la exalcaldesa de Chicago, Lori Lightfoot, se realizó un análisis de las finanzas, revelando que las cuentas del pueblo se encontraban exhaustas, con deudas que ascendían a 3,65 millones de dólares y facturas pendientes.

La gestión anterior, encabezada por Tiffany Henyard, había estado marcada por acusaciones de mala administración y falta de transparencia, lo que acentuó las preocupaciones sobre la capacidad de Dolton para asumir esta nueva responsabilidad. Mary Avent, una residente de la localidad, expresó su inquietud ante la junta: “Comprar la casa del papa es admirable, pero debemos cuestionarnos si tenemos los recursos”.

La respuesta del alcalde fue optimista: House se comprometió a solucionar el estado de las calles cercanas a la casa de Prevost y afirmó que la compra podría concretarse en un plazo de dos semanas. Sin embargo, el propietario actual de la casa no había respondido a las solicitudes de comentarios.

“Podemos aprovechar este momento o dejar que esta oportunidad pase a manos de un inversor”, comentó House, manifestando su deseo de que la comunidad se beneficie de esta situación. Varios miembros del consejo apoyaron su entusiasmo, comparando esta iniciativa con la de otros lugares significativos como la infancia de Michael Jackson.

Gino Ferrari, presidente de Windy City Construction, ofreció reparar el techo de la casa de forma gratuita, planteando que deseaba asegurarse de que esta propiedad tuviera un mantenimiento adecuado. Frente a la casa, se colocó un letrero destacando su importancia: “Casa de la infancia del papa León XIV”. Finalmente, mientras las cuadrillas trabajaban, los vecinos ofrecían ayuda y el ambiente era de optimismo: “Dolton ha vivido muchos desafíos, y este es un momento esperanzador para todos”, concluyó Ferrari.