Cristina Fernández busca visita de Lula mientras cumple prisión en Buenos Aires

BUENOS AIRES (AP) — La expresidenta de Argentina, Cristina Fernández, aspiró a recibir la visita del mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, con quien ha mantenido una alianza política histórica en la región. Fernández cumple prisión domiciliaria en su departamento de Buenos Aires luego de ser condenada por corrupción, y la decisión de autorizar o no la visita dependerá del tribunal que la sentenció y que regula las condiciones de su confinamiento durante seis años.

El abogado de la exmandataria, Alberto Beraldi, presentó un pedido formal ante los jueces del Tribunal Oral Federal N°2 para que Lula la visite, aprovechando su presencia en la ciudad por la Cumbre de Mercosur, programada para el miércoles y jueves, donde estarán presentes los líderes de los países miembros de la región: Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.

Desde mediados de junio, Fernández cumple con la condena de seis años por un caso de corrupción que se remonta a su gestión. A pesar de las restricciones, ha recibido visitas autorizadas de familiares, médicos, abogados y personal de seguridad en su departamento, ubicado en un antiguo edificio en el sur de la capital.

Uno de los requisitos que debe cumplir la líder del peronismo opositor, de 72 años, es solicitar permiso para visitas extraordinarias y justificar las razones que las motiven.

El primer pedido que realizó en este sentido fue el de Lula, con quien mantuvo lazos políticos e ideológicos fuertes a lo largo de sus respectivas gestiones. El presidente brasileño se comunicó con Fernández para ofrecer su apoyo tras la confirmación por parte de la Corte Suprema de Argentina del fallo que había recibido en 2022. Durante esa conversación, Lula reafirmó la importancia de que se mantenga firme ante la adversidad.

Al igual que Fernández, Lula también enfrentó su propia batalla legal. Durante su tiempo en prisión en Curitiba en 2019 por corrupción, recibió la visita de Alberto Fernández, el actual presidente argentino y ex candidato peronista a la presidencia. Este último lideró el gobierno en el que Cristina Fernández ocupó la vicepresidencia entre 2019 y 2023.

La exmandataria ha impugnado las condiciones de su régimen de visitas, y ahora será la Cámara de Casación Penal, el máximo tribunal penal del país, la que deberá decidir sobre este asunto.

Los jueces que llevaron su caso también han impuesto restricciones a sus apariciones públicas desde su departamento. A menudo ha saludado a sus seguidores desde el balcón, pero le han solicitado que no interfiera con la paz de la comunidad vecinal.

Fernández fue hallada culpable a fines de 2022 por administración fraudulenta tras comprobarse irregularidades en 51 procesos de licitación pública que ocurrieron durante su gestión entre 2003 y 2015, años que corresponden a la presidencia de Néstor Kirchner, su difunto esposo, y de los cuales ella fue parte activa.

La exmandataria se declara víctima de una persecución judicial organizada por sectores conservadores que buscan desplazarla del escenario político. Esta condena también implica que no podrá postularse como candidata a diputada provincial en las elecciones de septiembre en Buenos Aires, ya que la sanción incluye una inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.