El terrible hecho ocurrió en Italia con una mujer de 70 años. Marinella Beretta vivía sola y tanto sus vecinos como sus familiares pensaron que se había mudado por la pandemia.

La policía descubrió al cadáver sentado en una silla. Se acercaron al domicilio a raíz de unos árboles que habían caído y al llegar la lugar abrieron la puerta por la fuerza. Al ingresar encontraron el cuerpo sin vida de la mujer en la cocina de la casa.

Se descartó la posibilidad de un asesinato porque no había signos ni elementos que pudieran indicar que podría haberse llevado a cabo. 

Marinella Beretta no tenía parientes cercanos, pero sí una buena relación con sus vecinos. Sin embargo, ellos le dijeron a la Policía italiana que no la veían desde principios del 2020.

La ciudad donde residía.

Los vecinos creyeron que se había mudado por la pandemia del COVID-19, que azotó a la región a mediados del mes de febrero. “Nunca creímos que estuviera muerta, pensamos que se había ido a lo de un familiar”, comentaron, sorprendidos por la noticia.