Desesperante momento se vivió en una casa de Brasil cuando una adolescente de 13 años fue "chupada" por el filtro de la pileta, por el cual su cabello fue succionado por los filtros y ella quedó atrapada en el fondo de la piscina.

Todo quedó registrado en las cámaras de seguridad que muestran el momento en que la joven de top azul mete primero su cabeza, dejando sus pies hacia afuera, y luego comienza a patalear bajo el agua sin poder salir. La desesperación se apoderó de todos los presentes. 

Un hombre se lanzó al agua para intentar sacarla por la fuerza pero era imposible, hasta que una de las mujeres que había ingresado al domicilio acercó una gran cuchilla con la que le cortaron el cabello bajo el agua y pudieron rescatarla.

Inmediatamente le hicieron prácticas de primeros auxilios. La menor se encuentra en buen estado de salud.

Su madre, Rozana Pimentel, compartió en redes sociales el relato  y video de lo sucedido con una serie de recomendaciones para evitar que a otros les pase lo que ellos vivieron como familia. 

"El siguiente video muestra a mi hija ahogándose como resultado de estar atrapada en una ventosa. Decidí compartir estas imágenes para que conozcan el peligro de este tipo de dispositivo. Lo que mi familia y yo sentimos, el miedo y la desesperación de saber que pudimos haberla perdido, no le deseamos a nadie, por eso decidí dejar algunas recomendaciones para que ustedes los padres y todos en general estén al tanto de esto", comenzó diciendo.

Entre las recomendaciones dadas especificó:

1- Enseñe a sus hijos dónde está el succionador o desagüe y el peligro de ello, para que no se acerquen.

2- En cuanto a las personas que acompañan a los niños, quédense siempre cerca a la piscina mirando todo.

3- En cuanto a los propietarios, conozcan bien este método. Programe el proceso de filtrado sólo cuando la piscina esté cerrada y, si es posible, instale al menos dos conductos de succión para reducir la fuerza en cada uno de ellos.

4- Quizás un botón para el apagado de emergencia de la bomba de succión sería una gran alternativa.

"Y finalmente, quiero escribir públicamente que no hay nadie a quien culpar, los accidentes ocurren y depende de nosotros. Solo evita situaciones similares a partir de ahora. Por eso, yo también en nombre de toda nuestra familia, agradecemos a Dios primero por el milagro que nos fue dado a nosotros y a las personas que lograron buscar una alternativa para salvar a mi hija a tiempo", cerró.

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