Quejas de docentes por las condiciones en las escuelas: "Al comedor traen arroz y lenteja, cuando en julio mandaban sánguches de mortadela"

Tanto docentes de escuelas públicas como privadas de Rosario reclamaron al Ministerio de Educación provincial que, ante la ola de calor que afecta la zona, se suspenda el dictado de clases en las escuelas que “no estén preparadas para trabajar con temperaturas elevadas”.

En ese marco, el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, dijo este lunes que, ante las particularidades de cada establecimiento educativo, hay “directores con la capacidad de decidir eso se puede dar clases o no”.

“Estoy bastante mal, preocupada. No es por la ola de calor, sino estas declaraciones tan sueltas de cuerpo nada menos que del gobernador, librando a directivos de las escuelas de la responsabilidad de suspender nada más ni menos que el servicio educativo en barriadas donde los chicos están desposeídos de todo”, dijo la docente de barrio Las Flores Marisa Aybar, a Rodrigo Ipolitti en Viva la Radio por Cadena 3 Rosario.

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Realidad. “Hay muchas escuelas inmersas en los mismos problemas que la comunidad, hechas del mismo material (chapa), con la luz tenemos los mismos problemas, con el agravante de que ni siquiera hay ventiladores para todas las aulas”.

Disparidad. “El comedor para 490 alumnos casi 500, un menú de arroz y lenteja, propio para pleno julio, en julio nos daban mortadela con queso y una naranja. El margen de previsibilidad que tendría que tener gente que ha sido elegida para gobernar y no decirnos ‘yo doy clases igual’”.

Presiones. “Mañana (martes) hay plenarios. Alumnos desobligados a partir de las 10.45 y el turno tarde a partir de las 14.30 tiene que ir. La bajada -ellos que tanto hablan del criterio del directivo-, no es libre, hay presiones muy fuertes para que las clases sean a como dé lugar”.

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Servicio esencial. “Reglamentariamente, (el directivo) tendría potestad (de suspender clases) por falta de agua. El comedor funciona siempre, es un servicio esencial que la comunidad lo necesita sí o sí, por eso pedimos desesperadamente que los tiempos de la vida real, es decir de la necesidad de la gente, del alumnado y condiciones de trabajo, sean ya”.

Sub-ejecución y preguntas. “Acá hay un presupuesto que nunca se termina de ejecutar ¿Qué es lo que falla si la plata está para el presupuesto educativo? ¿Por qué se tarda tanto en lo burocrático? ¿Se termina devolviendo o no se termina gastando el dinero que está presupuestado para educación? ¿Por qué siempre llegamos tarde?