Unicef reconoció que 1,7 millones de niños salieron de la pobreza

Rafael Ramírez Mesec, representante de Unicef Argentina, destacó que cerca de 1,7 millones de niños y niñas han salido de la pobreza en el último año, pese al ajuste económico que recortó el gasto público en un 5% del PBI. 

En el marco de los 40 años de Unicef en el país, enfocados en proteger los derechos de la niñez, resaltó el impacto de políticas como la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Tarjeta Alimentar, que ahora incluye a adolescentes de hasta 17 años. 

Sin embargo, señaló que aún persisten desafíos para garantizar plenamente los derechos de los niños.

Brecha digital y retos educativos

Aunque el 90% de los niños argentinos tiene acceso a internet, Ramírez advirtió que la falta de computadoras limita su capacidad para aprovechar esta conectividad. 

Con la llegada de la inteligencia artificial, subrayó la necesidad de enfrentar tanto sus oportunidades como sus riesgos. 

En educación, expresó preocupación por el bajo desempeño en matemáticas, donde el 85% de los estudiantes muestra rezagos según evaluaciones recientes, indicando que el aprendizaje sigue siendo un área prioritaria para mejorar.

Colaboración con el gobierno y foco en la niñez

Unicef mantiene un diálogo constante con el Ministerio de Capital Humano y otras secretarías, trabajando de forma apartidista para promover políticas como el plan nacional de alfabetización y la priorización de la primera infancia. 

Ramírez enfatizó la importancia de colaborar con todos los gobiernos, adaptándose a cambios institucionales para proponer soluciones y expresar inquietudes. 

Este trabajo busca asegurar que los niños puedan desarrollarse plenamente, en línea con los principios de la Convención sobre los Derechos del Niño.

Unicef: cuatro décadas de compromiso

Con 40 años de labor ininterrumpida en Argentina, Unicef reafirma su misión de asistir a niños en contextos de vulnerabilidad y conflicto a nivel global. 

Ramírez expresó el anhelo de que la organización pueda dejar de ser necesaria cuando los derechos de los niños estén garantizados, permitiendo su desarrollo sin intervención externa. 

La labor de Unicef combina asistencia humanitaria con la promoción de políticas que empoderen a las nuevas generaciones, apostando por un futuro donde los niños ejerzan sus derechos sin barreras.