La ensalada rusa perfecta: los secretos y variantes para disfrutarla en casa

La ensalada rusa, un plato emblemático de la gastronomía argentina, ha estado presente en las mesas familiares desde hace más de un siglo. Esta deliciosa ensalada, que combina papas, zanahorias, arvejas y mayonesa, se ha convertido en un símbolo de celebraciones y reuniones familiares. De origen ruso, llegó a Argentina a través de inmigrantes europeos que se asentaron en el país y, con el tiempo, se adaptó a los gustos locales, dando lugar a distintas variantes que enriquecen su sabor y apariencia.

Las recetas más tradicionales incluyen papas, zanahorias cocidas, arvejas y mayonesa, aunque no faltan las versiones que incorporan otros ingredientes, como pollo, jamón, aceitunas o huevo duro, cada uno aportando su toque particular. Se suele servir fría, lo que la convierte en una opción refrescante para los días calurosos de verano o en picnics. Su versatilidad le ha permitido trascender su rol como guarnición, convirtiéndose en un plato principal en muchas ocasiones.

En cuanto a su historia, es interesante notar que durante la década de 1930 la ensalada rusa comenzó a popularizarse en la alta sociedad argentina como símbolo de sofisticación. Con el paso de los años, su aceptación se expandió al resto de la población, convirtiéndose en una opción habitual en fiestas y reuniones. En cada región del país puede encontrarse una variante que refleje las costumbres culinarias locales, por lo que es posible encontrar ensaladas rusas que integran ingredientes característicos de cada provincia.

Para hacer la ensalada rusa perfecta, se recomienda seleccionar ingredientes frescos y de calidad. La elección de la mayonesa también es clave; se puede optar por una casera, que siempre resulta más sabrosa, o una comercial que se adapte a los gustos de los comensales. El momento ideal para disfrutar de esta ensalada es durante las épocas festivas, cuando familiares y amigos se reúnen alrededor de la mesa.

La ensalada rusa no solo es un manjar gastronómico, sino que también se ha instalado como una icónica representación de la hospitalidad argentina. Cada bocado trae consigo un pedazo de historia y cultura que amalgama las influencias europeas con el espíritu criollo. Su presencia en la cocina nacional se da en un contexto donde la fusión de culturas ha generado una identidad culinaria rica y variada que merece ser celebrada.

Pasos

1. Cocinar las papas y zanahorias en agua con sal hasta que estén tiernas, luego escurrir y dejar enfriar.

2. Pelar las papas y zanahorias, cortarlas en cubos y mezclar en un bol grande.

3. Agregar las arvejas y, si se desea, incorporar huevo duro picado, aceitunas, pollo o jamón.

4. Añadir mayo al gusto, mezclar suavemente y ajustar la sal.

5. Refrigerar por al menos una hora antes de servir. Decorar con perejil picado si se desea. Servir fría.

Ingredientes

- 500 g de papas

- 300 g de zanahorias

- 200 g de arvejas

- 200 g de mayonesa

- Sal al gusto

- Opcional: huevo duro, aceitunas, pollo o jamón.