Córdoba decomisó pirotecnia por $139 millones y desarticuló más de mil puestos

La Municipalidad de Córdoba decomisó pirotecnia ilegal valuada en aproximadamente 139 millones de pesos y desarticuló más de mil puestos de venta clandestina en un operativo especial desplegado en la previa de las fiestas. Así lo informó el director ejecutivo del Ente Municipal de Fiscalización y Control, Ezequiel Hormaeche.

Hormaeche explicó en Cadena 3 que desde el viernes previo a Navidad se realizaron alrededor de 1.052 operativos conjuntos, impulsados por decisión del intendente y coordinados con el Ministerio de Seguridad, la Secretaría de Gobierno, la Policía, la Guardia Urbana y los CPC. Señaló que el 85% de los procedimientos estuvo vinculado a la venta ilegal de pirotecnia y que los secuestros aumentaron un 60% en comparación con 2024.

El funcionario detalló que los controles se concentraron tanto en las áreas comerciales y peatonales del centro como en los barrios, a partir de un "mapa de calor" elaborado con denuncias recibidas a través del 103 y de la plataforma digital municipal, que permite realizar reclamos las 24 horas. Indicó que se registraron cerca de 1.400 denuncias, las cuales dieron origen a los operativos realizados.

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Según precisó Hormaeche, toda la pirotecnia incautada fue entregada a la Brigada de Explosivos del Ministerio de Seguridad. Remarcó además que la venta ambulante está prohibida en la ciudad y que, en el caso de rubros no vedados, los vendedores son derivados a ferias habilitadas por el municipio, aunque aclaró que esa alternativa no aplica para la comercialización de pirotecnia por el riesgo que implica.

El director del Ente señaló en Cadena 3 que también se detectaron centros de acopio mayorista en zonas como Villa Libertador, Donato Álvarez y el centro de la ciudad, desde donde se distribuía mercadería a vendedores minoristas. En esos lugares se procedió al secuestro de grandes volúmenes, en el marco de lo establecido por la ordenanza vigente que prohíbe la venta de artículos peligrosos.

Hormaeche reconoció que, si bien muchos vendedores cesaron la actividad de manera preventiva, en el caso de la pirotecnia se registraron resistencias y algunos episodios de violencia, lo que motivó una fuerte intervención de las fuerzas de seguridad. También advirtió sobre una modalidad de comercialización a través de entregas a domicilio, detectada mediante tareas de inteligencia, que derivó en actas y secuestros en vehículos utilizados para el reparto.

En cuanto a los productos más incautados, indicó que las tortas de fuegos artificiales de gran volumen y las cañitas voladoras encabezaron el listado, con un patrón horario que concentró la venta en el centro durante la mañana y en los barrios por la tarde y la noche.

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Entrevista de Miguel Clariá, Guillermo López y Luis Fernández Echegaray.