Compró terrenos y denunció que desde el entorno de Toviggino se los usurparon

El empresario hotelero Bruno Frattari, oriundo de Oncativo, Córdoba, denunció haber sido víctima de la usurpación de un campo de 1.700 hectáreas en la provincia de Santiago del Estero y señaló directamente a Pablo Toviggino, tesorero de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), como parte central del conflicto. Según su testimonio, además de perder la posesión efectiva de las tierras, recibió amenazas personales y detectó maniobras irregulares que, afirmó, nunca fueron investigadas por la Justicia local.

Frattari explicó que su familia adquirió los terrenos en 2004 y que durante los primeros años enfrentó intentos de usurpación menores, los cuales —según indicó— fueron resueltos judicialmente en 2004 y 2008. Sin embargo, sostuvo que la situación se agravó a partir de 2011, cuando las tierras comenzaron a ser ocupadas por personas vinculadas a Toviggino y a su entorno familiar y político.

En su relato, el empresario identificó a Fernando "Polo" Figueroa, padrastro de Toviggino, como la persona encargada de ocupar y "cuidar" los lotes. También mencionó que las tierras estarían relacionadas con intereses del hermano del gobernador santiagueño, Gerardo Zamora. "A partir de ese momento ya no fue una usurpación aislada, sino algo organizado", afirmó Frattari.

El empresario aseguró que entre 2016 y 2017 fue convocado a una reunión en la que conoció personalmente a Pablo Toviggino. Según declaró en Cadena 3, allí recibió una advertencia directa. "Te la voy a hacer corta: nosotros somos los que estamos en el campo, lo vamos a vender y te vamos a dar el 50%", relató Frattari, al describir lo que interpretó como una presión para resignar parte de la propiedad a pesar de ser el titular legítimo.

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Uno de los puntos más graves de su denuncia está relacionado con lo que dijo haber observado en la parte trasera del campo, en una zona conocida como "Cola del Desierto". Frattari sostuvo que, a través de cámaras ocultas, pudo constatar que un camino rural —identificado como la "picada YPF"— fue ensanchado varias veces más de lo habitual. "Eso no es un camino común, está preparado como una pista de aterrizaje", afirmó.

En ese sentido, vinculó esa situación con la caída de una avioneta en la zona y aseguró que declaró sobre estos hechos en Buenos Aires ante autoridades judiciales.

El empresario también cuestionó duramente el funcionamiento del sistema judicial y registral provincial. Según explicó, quienes ocupan el campo presentaron una supuesta escritura para litigar en su contra. Al verificar los datos en el registro oficial, Frattari afirmó haber descubierto una irregularidad llamativa. "La escritura que presentaron, con ese número, no corresponde a un terreno: era una licencia de conducir", aseguró, al describir lo que consideró una maniobra fraudulenta.

Frattari remarcó que, pese a las denuncias y a la documentación presentada, no obtuvo respuestas favorables en la provincia. "Es una burla", sostuvo, y reiteró que su familia continúa sin poder ejercer la posesión efectiva de un campo que —según afirmó— fue adquirido legalmente y cuenta con antecedentes judiciales favorables.

El empresario señaló que decidió hacer público su testimonio para visibilizar el caso y reclamar que se investiguen las amenazas, la usurpación de tierras y las irregularidades que estaría rodeando al conflicto.

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Entrevista de Miguel Clariá.