Crisis en el gobierno
03/06/2025 | 06:36
Redacción Cadena 3
LA HAYA (AP) — El legislador de ultraderecha Geert Wilders decidió retirar a su partido, el Partido por la Libertad, de la coalición gobernante en los Países Bajos, lo que desató una crisis política significativa a solo 11 meses de iniciar su gestión con el primer ministro Dick Schoof. La decisión se comunicó durante una breve reunión entre los líderes de los cuatro partidos de la coalición, donde Wilders expresó su frustración por la falta de medidas en las políticas migratorias.
La crisis se agudiza en un momento crítico, ya que Holanda se prepara para albergar una cumbre de la OTAN en La Haya dentro de tres semanas, en un contexto global de inestabilidad.
Ante la situación, se desconoce cuáles serán los pasos a seguir. La coalición podría deliberar sobre la posibilidad de continuar en el poder como un gobierno en minoría o decidir convocar elecciones anticipadas para finales de 2025. El primer ministro Schoof convocó una reunión de urgencia para abordar el tema con su gabinete en la tarde del mismo día.
En declaraciones a los medios, Wilders afirmó que su decisión surgió por la insatisfacción con la inacción respecto a las políticas de asilo y migración. “Me uní a la política con la idea de una postura más estricta en inmigración, no para ver a Holanda caer”, manifestó el legislador. Su partido, a pesar de este conflicto, sigue manteniendo un fuerte apoyo en las encuestas de opinión, aunque la distancia entre ellos y la oposición de centroizquierda se ha reducido.
Wilders había solicitado previamente a sus socios en la coalición que firmaran un plan de 10 puntos que proponía medidas drásticas para limitar la inmigración, incluidas acciones como el uso del ejército para el control de las fronteras y el rechazo de toda solicitud de asilo. En una declaración anterior, dejó en claro que si no se cumplían sus demandas, su partido se retiraría del gabinete, una amenaza que concretó recientemente.
La decisión de Wilders también se produce en un contexto más amplio, en un momento en que Polonia se encuentra en un proceso político similar, tras la elección del conservador Karol Nawrocki como presidente. Este nuevo liderazgo sugiere un posible giro hacia políticas más populistas y nacionalistas en la región, lo que podría influir en los acontecimientos en Holanda.
Rob Jetten, del partido opositor D66, advirtió sobre la naturaleza complicada de las coaliciones con Wilders, sugiriendo que su comportamiento había sido predecible. La líder del Movimiento Campesino Ciudadano, Caroline van der Plas, también criticó la decisión de Wilders, señalando que anteponía sus intereses personales a los del país.
Sin embargo, otros miembros de la coalición, como Nicolien van Vroonhoven, del partido Nuevo Contrato Social, opinaron que un gobierno minoritario podría ser una opción viable, sugiriendo que la coalición podría seguir adelante sin la participación de Wilders.
A medida que la situación se desarrolla, el futuro político de la coalición gobernante de Holanda se presenta incierto, mientras líderes políticos de distintas formaciones buscan el camino a seguir.
[Fuente: AP]
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