Perú lleva a cabo 422 operativos contra minería ilegal en lo que va de 2025

LIMA (AP) — Desde el inicio de 2025, Perú llevó a cabo más de 400 operativos destinados a combatir la minería ilegal, un delito que se ha convertido en un negocio más rentable que el narcotráfico, impactando en múltiples áreas como la seguridad pública y el medio ambiente, reportó el gobierno el miércoles.

Según el primer ministro, Eduardo Arana, en un comunicado oficial, “la minería ilegal y el crimen organizado asociado a dicha actividad representan un problema gravísimo, ya que atentan contra la seguridad y el bienestar de la población”. Hasta fines de mayo, se registraron un total de 422 operativos.

Estas afirmaciones se realizaron luego de que el gobierno decidiera revertir su controvertida decisión de reducir en un 42% el área protegida que rodea a las Líneas de Nazca, una medida muy criticada por facilitar el acceso de mineros ilegales a una zona con restos arqueológicos que abarca aproximadamente 2.400 kilómetros cuadrados.

La intensificación de los operativos por parte del gobierno se produjo tras el descubrimiento de 13 cadáveres en Pataz, una remota región andina donde la minería ilegal es prominente. Además, la policía reportó al menos dos muertes en La Pampa, otro punto caliente de minería ilegal en la Amazonía, como resultado de un enfrentamiento entre grupos criminales que luchan por el control del área.

En Perú, la minería ilegal sucede en áreas prohibidas por ley, tales como orillas de ríos, lagunas, zonas protegidas y áreas arqueológicas. Aunque los mineros ilegales buscan predominantemente oro, también extraen cobre, cuya demanda en China continúa en aumento, según indicaron las autoridades.

En mayo, el entonces primer ministro, Gustavo Adrianzén, afirmó que la minería ilegal era más rentable que el narcotráfico. Un informe de noviembre de la fiscalía ambiental apuntó que esta actividad genera aproximadamente 12.000 millones de dólares y que involucra a unas 300.000 personas en casi todas las regiones del país. Perú, por su parte, es el tercer productor mundial de cobre, solo superado por Chile y el Congo, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos.