Jefe de agencia antidroga de la UE alerta sobre creciente violencia por estimulantes

El máximo responsable europeo en la lucha contra las drogas, Alexis Goosdeel, realizó un llamativo aviso en su despedida. La violencia atribuida al tráfico de cocaína y los estimulantes ha dado un salto inédito en las sociedades más seguras del mundo.

Desde su cargo como director de la Agencia de la Unión Europea sobre Drogas, cargo que ocupa desde enero de 2016, Goosdeel observó cómo el tráfico de estas drogas se ha intensificado y afectado a su país natal, Bélgica. Las incautaciones de drogas han ido desplazándose de la costa sur de Europa a los puertos del norte, siendo Amberes el punto de entrada más destacado para la cocaína y el crack. Como resultado, la violencia asociada a las pandillas ha aumentado, con tiroteos incluso cerca de la sede del gobierno europeo.

“Para aquellos que viven en Bruselas, es la primera vez en la historia que se producen tiroteos en el centro de la ciudad”, indicó Goosdeel durante una videoconferencia desde Lisboa, donde tiene su sede la agencia. “Esto sucede a sólo 2.000 metros del Parlamento Europeo, en una ciudad antes considerada segura”, agregó.

Auge de la violencia y pandillas

El director saliente mencionó la globalización de las organizaciones narcotraficantes, señalando que los grupos de los Balcanes occidentales han sido arrestados en países de Sudamérica. Además, destacó un nuevo fenómeno: las pandillas que utilizan las redes sociales para reclutar jóvenes vulnerables, especialmente a migrantes recién llegados a Europa.

“Esto plantea preguntas sobre las causas de este cambio en el comportamiento de los adolescentes que se involucran en actos de violencia extrema. Algunos de ellos comparten imágenes y videos de sus acciones en redes sociales”, puntualizó.

Preocupaciones por la salud pública

El informe anual de la agencia sobre drogas, presentado recientemente, reveló que las incautaciones de cocaína en Europa alcanzaron un récord en 2023, con 419 toneladas confiscadas. Bélgica lideró esta cifra con 123 toneladas, seguida de España y Países Bajos, que representan en conjunto el 72% del total de incautaciones.

Goosdeel también subrayó la inminente amenaza a la salud pública. A pesar de que la adicción a los opioides puede ser tratada, señaló que no existe un tratamiento estándar para los estimulantes, lo que podría resultar en un aumento de las necesidades de tratamiento en los próximos años.

“En cuatro o cinco años, podría haber una creciente demanda de tratamientos debido al aumento en el consumo de estimulantes. No hay medicamentos eficaces para ayudar a las personas a superar esta fuerte adicción”, advirtió. “Es urgente invertir en soluciones efectivas”.

Europa, además, sigue siendo el principal productor y exportador de éxtasis. Goosdeel destacó que el sistema de alerta temprana de la agencia ha identificado más de 1.000 nuevas sustancias en los últimos 27 años, y que más del 50% de ellas fueron detectadas en la última década, pasando a un contexto completamente transformado.

Goosdeel hizo hincapié en que el abordaje en Europa no debe ser la criminalización de los consumidores, sino el cuidado y apoyo a quienes luchan contra la adicción. En este sentido, los responsables políticos deben evitar estrategias punitivas similares a las de la “guerra contra las drogas” en Estados Unidos.

“Hemos aprendido que declarar la guerra a las personas que consumen drogas no es la respuesta correcta”, afirmó.