Indagan supuesto plan para sacar a Gustavo Petro del poder en Colombia

BOGOTÁ (AP) — El martes, la fiscalía colombiana anunció la apertura de una indagación por un supuesto plan destinado a forzar la salida del poder del presidente Gustavo Petro, que habría sido orquestado por un exalto funcionario. Este hecho ha desencadenado un aluvión de reacciones en el ámbito político colombiano.

La entidad judicial informó, a través de un comunicado, que se llevarían a cabo “actos investigativos y órdenes a la policía judicial” para esclarecer las circunstancias de los eventos denunciados. La situación ha captado la atención de la ciudadanía y de los medios de comunicación debido a su gravedad.

El plan en cuestión fue atribuido al excanciller Álvaro Leyva, un político conservador de 82 años, quien en audios divulgados el pasado fin de semana por el diario El País subrayó su intención de que Petro fuera apartado del poder antes de finalizar su mandato en agosto de 2026.

La fiscalía también confirmó que incorporará a la indagación la solicitud realizada por la vicepresidenta Francia Márquez, quien horas antes pidió iniciar una investigación judicial sobre el plan, en el cual fue mencionada.

Márquez expresó en la carta enviada a la fiscalía que “de manera infundada he sido mencionada en este reprochable episodio” y subrayó la necesidad de que el país conozca rápidamente la verdad sobre lo sucedido.

Dentro de los audios, Leyva planteó la posibilidad de contactar a congresistas estadounidenses como Mario Díaz-Balart y Carlos Giménez, con el objetivo de ejercer “presión internacional” para obligar a Petro a renunciar. No obstante, ambos congresistas han negado cualquier complicidad en el mencionado plan.

En las grabaciones, Leyva comentaba: “Hay que sacar ese tipo (Petro). Ese tipo presidiendo las elecciones... el orden público se ha desbordado. Eso no puede suceder sin un gran acuerdo nacional, donde deben estar incluidos el ELN (Ejército de Liberación Nacional) y el Clan del Golfo”, aunque no se especificó quién era el interlocutor en esas conversaciones.

A lo largo del escándalo, Leyva también sugirió que Márquez podría asumir el cargo de Petro, un hecho que la vicepresidenta ha desmentido categóricamente.

El excanciller, vinculado estrechamente a Petro en su gobierno hasta principios de 2024, intentó justificarse ante los medios, alegando que sus comentarios fueron parte de una conversación privada. Sin embargo, el trasfondo de los audios ha generado una fuerte condena pública.

El presidente Petro catalogó la situación como una “venganza bárbara” y exigió que todos los mencionados en los audios rindan cuentas, tanto públicamente como ante la justicia. Desde el inicio de su mandato, Petro ha denunciado tener conocimiento de diversos planes en su contra, incluyendo amenazas más graves.

Finalmente, es relevante mencionar que Leyva ya había tenido problemas con la ley, siendo separado de su cargo y sancionado disciplinariamente el año anterior por irregularidades en un proceso de licitación de pasaportes.