Ciudadano estadounidense presenta demanda tras ser arrestado por autoridades migratorias

Leo García Venegas, un trabajador de la construcción de Alabama y ciudadano estadounidense, presentó una demanda ante un tribunal federal después de haber sido detenido dos veces por agentes de inmigración en un corto período de tiempo. En la demanda, exige el fin de las redadas laborales llevadas a cabo por el gobierno del presidente Donald Trump, que se concentran en industrias con alta presencia de inmigrantes.

La demanda colectiva, presentada por Venegas junto con el Institute for Justice, un bufete de abogados de interés público, argumenta que las redadas constituyen "tácticas inconstitucionales e ilegales de aplicación de las leyes de inmigración". Venegas, nativo de Estados Unidos, reside y trabaja en el condado de Baldwin, Alabama, una región que ha visto un importante crecimiento demográfico en los últimos 15 años y que presenta amplias oportunidades laborales en el sector de la construcción.

La presentación de la demanda ocurre poco después de que la Corte Suprema levantó una orden de restricción que impedía a los agentes de inmigración en Los Ángeles detener a personas basándose únicamente en su raza, idioma, trabajo o ubicación.

Este caso se aborda en un contexto donde la corte ha respaldado varias de las importaciones más estrictas de la administración de Trump, aunque deja abierta la posibilidad de cambios en los resultados legales a medida que se avanza en los casos.

La demanda describe una serie de redadas en lugares de trabajo, enfatizando que los agentes no tenían órdenes ni pruebas específicas sobre la situación migratoria de trabajadores. Además, menciona la detención de ciudadanos estadounidenses, muchos con nombres de origen latino, lo que sugiere un sesgo racial en las operaciones de ejecución de la ley migratoria.

Según el texto de la demanda, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) lleva a cabo estas redadas armadas basándose en suposiciones generales que vinculan grupos específicos a la ilegalidad migratoria. En una de las redadas en mayo, Venegas fue filmado por un compañero de trabajo, forzado al suelo por agentes de inmigración, a pesar de insistir en su condición de ciudadano estadounidense.

La demanda detalla que los agentes dirigieron su atención a los trabajadores que aparentaban ser latinos, mientras que dejaron a otros trabajadores sin ser molestados. Venegas fue liberado tras más de una hora de detención. Menos de un mes después, volvió a ser detenido en otro sitio de construcción.

"Es como si no hubiera nada que pudiera hacer para evitar que los agentes de inmigración me arresten cuando quieren", expresa Leo García Venegas. "Solo quiero trabajar en paz. La Constitución protege mi derecho a hacerlo". Venegas, que se dedica a la colocación de cimientos, indicó que fue detenido en ambas ocasiones demostrado su licencia de conducir REAL ID, que es exclusiva para ciudadanos estadounidenses y residentes legales.

Los agentes de inmigración alegaron que su identificación era falsa, aunque fue liberado poco después. El abogado de Institute for Justice, Jaba Tsitsuashvili, defendió que "los agentes de inmigración no están por encima de la ley". “Leo es un ciudadano estadounidense trabajador que defiende el derecho de todos a trabajar sin ser detenidos simplemente por su apariencia o el trabajo que realizan”. Hasta el momento, el DHS no ha emitido comentarios respecto a la situación.