Bolsonaro y un grupo de allegados habrían usado inteligencia para espiar a periodistas y jueces

RÍO DE JANEIRO (AP) — La policía federal de Brasil formuló cargos contra el expresidente Jair Bolsonaro y 35 cómplices por participar en un extenso plan de espionaje. Según la acusación, la agencia nacional de inteligencia fue utilizada para rastrear a jueces, legisladores y periodistas. El Supremo Tribunal Federal reveló un documento de 1.125 páginas que amplía las complicaciones legales del exmandatario, quien lideró el país entre 2019 y 2022.

El informe de la policía indica que Bolsonaro estaba al tanto de esta operación que lo beneficiaba directamente. Durante la investigación, el agente Daniel Carvalho Brasil Nascimento, que dirige el caso, identificó a Carlos Bolsonaro, hijo del expresidente y concejal de Río de Janeiro, como un actor clave en esta organización. La investigación de la policía se centra en una estructura paralela dentro de la agencia de inteligencia de Brasil que operó clandestinamente.

La policía federal destacó que “Bolsonaro y Carlos definieron las directrices estratégicas de la organización criminal, seleccionando los objetivos de las acciones ilegales (contra opositores, instituciones, el sistema electoral) para conseguir beneficios políticos”. Ellos se encuentran en el centro de la toma de decisiones y serían los principales beneficiarios de los actos en cuestión.

Bolsonaro, actualmente inhabilitado por el tribunal electoral para postularse en las próximas elecciones, ya se enfrenta a un juicio por tratar de ejecutar un golpe de Estado tras su derrota electoral frente a Luiz Inácio Lula da Silva en 2022. El exmandatario niega cualquier irregularidad y sostiene que es objeto de una persecución política.

Una de las acusaciones en su contra en el caso del golpe de Estado es liderar una organización criminal, lo que impidió que la policía federal solicitara nuevos cargos en el informe presentado. Si se lo acusara nuevamente por los mismos hechos, podría enfrentarse a la prohibición de doble castigo o acusación por el mismo acto.

La evidencia presentada en el informe puede implicarse en la investigación del golpe de Estado. Celso Vilardi, abogado de Bolsonaro, comunicó a Associated Press que aún no ha revisado el contenido del informe y las acusaciones en su contra.

Asimismo, la policía formuló cargos contra Luiz Fernando Corrêa, quien dirigía la agencia de inteligencia durante el gobierno de Lula, por interferencia indebida en las investigaciones. Mientras tanto, los empleados de la agencia emitieron un comunicado exigiendo la renuncia de Corrêa, quien no respondió a las solicitudes de comentarios.

El Supremo Tribunal Federal ahora enviará la investigación al fiscal general Paulo Gonet, quien decidirá si el caso deberá ser presentado ante el máximo tribunal. El año pasado, la policía arrestó a cinco personas por sospechas de uso indebido de la agencia de inteligencia brasileña.

Los documentos judiciales revelaron que diversas autoridades fueron objeto de investigaciones ilícitas, incluidos expresidentes del Congreso, jueces del Supremo Tribunal Federal, funcionarios de la agencia ambiental de Brasil y destacados periodistas.

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Savarese informó desde Sao Paulo.

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Esta noticia fue traducida del inglés por un editor de AP con asistencia de inteligencia artificial generativa.