Alfredo Di Stéfano, “La Saeta Rubia”

Si es cierto que el Real Madrid es la Casa Blanca del fútbol, entonces Alfredo Di Stéfano es su George Washington. "La Saeta Rubia" fue un grande del deporte y uno de los mejores futbolistas de la historia, sin vueltas, ni lugar a discusión.

Goleador con cifras de asombro, triunfador en la Argentina, en Colombia, en España y reconocido en el mundo entero. Alfredo Di Stéfano fue la “Saeta Rubia” del fútbol por su increíble velocidad y por el color de su cabello.

Según el diccionario, una saeta es una flecha que se dispara “con” un arco. En este caso Alfredo era una flecha salía disparado “contra” un arco.

Aunque jugaba con la camiseta número 9, "La Saeta" fue uno de los futbolistas más integrales y completos que pisaron alguna vez el verde césped.

Fue un jugador de toda la cancha, por eso es tan difícil determinar en qué puesto jugaba. Era más bien un "todocampista".

La Saeta Rubia superaba con facilidad a sus rivales en velocidad y no dejaba sector de la cancha sin recorrer, regándola de entrega y sudor comprometido.

Alfredo Di Stéfano fue un auténtico jugador de equipo. Por esa razón fue un futbolista para cualquier época, por eso no tendría problema en ser, hoy, tan crack como lo fue en su tiempo.

Su fútbol estaba cargado de electricidad, era directo, como su personalidad, de una sinceridad que hasta ofendía. Era lo contrario del futbolista argentino de esos años: casi todos parsimoniosos y gambeteadores. La Saeta iba a los bifes.

Alfredo Di Stéfano es sinónimo del Real Madrid y viceversa. El Merengue se convirtió en la Casa Blanca del fútbol, con Di Stéfano en la cancha y con Don Santiago Bernabéu como presidente del club.

Fueron 5 las Copas de Europa ganadas en forma consecutiva con La Saeta, liderando un equipo de ensueño.

El argentino fue considerado uno de los 4 mejores jugadores del siglo XX, junto con Maradona, Cruyff y Pelé. La Revista France Football lo consideró el mejor de los ganadores del Balón de Oro hasta 1999 y le entregó el Super Balón de Oro.

Simple, sin rebusques para entender y para jugar al fútbol: Alfredo decía que siempre fue igual: el fútbol no fue mejor, ni peor antes. Siempre se jugó bien o se jugó mal. El jugador pone la técnica y el entrenador el orden.

Desde el 2000 hasta su fallecimiento en 2014 fue Presidente Honorario del Real Madrid y la cancha de la Ciudad Deportiva lleva su nombre.

Alfredo Di Stefano nació en Barracas, Buenos Aires, el 4 de julio de 1926. Fue un producto de la insuperable y fructífera cantera de River, donde debutó el 15 de julio 1945. Con la banda roja en el pecho, fue dos veces campeón y jugó hasta 1949, con una pausa.

En 1946 jugó a préstamo un año en Huracán para adquirir experiencia. En el Parque de los Patricios brilló junto al Tucho Mendez y al Turco Simes. En el Globito anotó 10 goles en 25 partidos.

Cuando volvió a River en 1947 reemplazó a Adolfo Pedernera. River cambio su estilo con él. Fue campeón y goleador con 27 goles en 30 partidos.

Ese año, con la Selección Argentina ganó el Campeonato Sudamericano de 1947, en Guayaquil, su único logro con la camiseta albiceleste.

La huelga de futbolistas argentinos, en 1948, apresuró el cierre de su carrera en nuestro país y lo llevo a Colombia., donde jugó en Millonarios.

La Liga del país cafetero no estaba reconocida por la FIFA, era considerara una especie de Liga Pirata. En Argentina el conflicto de los futbolistas se prolongó un par de años.

Junto a Adolfo Pedernera y el Pipo Rossi, entre otros, conformaron el llamado “Ballet Azul, que le dio a Millonarios 4 campeonatos y la Saeta encabezó la tabla de goleadores en dos ocasiones.

En una gira de Millonarios por España, el Ballet Azul le pegó un baile de novela al Real Madrid. Haciendo referencia a Di Stéfano, uno de los jugadores del Real Madrid, Miguel Muñoz dijo : “ Nos regateó como a banderines en un campo de entrenamiento”

El pase de Di Stéfano al Real Madrid fue uno de los más controvertidos y complicados, fue un verdadero culebrón.

River y Millonarios se adjudicaban los derechos de pertenencia del jugador. El Madrid negocio con Millonarios, y el Barcelona, que también lo quería, con River. La FIFA respaldaba una postura; la Federación Española la otra. Di Stéfano entrenó un par de meses en el Barsa, pero no jugó ningún partido. FIFA decidió que Alfredo jugaría dos años en el Real y los dos siguientes en Barcelona, el Club Catalán no lo acepto y comenzó a escribirse otra historia, ya nada sería igual en el fútbol de España y de Europa.

El 23 de septiembre de 1953 la Saeta Rubia se puso por primera vez la camiseta Merengue. Con 27 años Alfredo Di Stéfano llegó al Real Madrid. Su arribo produjo una revolución y el Merengue se convirtió en el club más ganador y más importante de todos los tiempos.

Hasta entonces, Barcelona era el equipo con más títulos, Real Madrid llevaba 20 años sin obtener la Liga y estaba quinto en la tabla de los campeones en España detrás del Barsa, del Bilbao, del Atletico Madrid y del Valencia.

Desde 1954 hasta 1964 Real Madrid, con Di Stéfano, ganó 8 de 11 campeonatos de la Liga. Los cinco títulos continentales consecutivos entre 1955 y 1960 lo llevaron a la cúspide.

Fue el Pichichi en España durante 5 temporadas y 3 en ocasiones fue el goleador de la Copa de Europa. Su equipo era conocido como el Madrid de La Saeta Rubia, tanto como el Santos de Pelé.

En 1956 adoptó la nacionalidad española y disputó 31 partidos, convirtiendo 23 goles con la camiseta de La Furia. Por distintas circunstancias la Saeta Rubia nunca pudo jugar en un Mundial.

El argentino, se retiró en el Español de Barcelona, después de jugar durante dos temporadas.

En 1966, a pocos meses de cumplir 40 años, la Saeta se despidió del fútbol. Durante su carrera convirtió 489 goles en 669 partidos entre clubes.

Como Director Técnico es el único en toda la historia que fue campeón dirigiendo a Boca y a River. En la entidad Xeneize ganó el Nacional 69, con un equipo inolvidable y la Copa Argentina de ese año. En River llegó en 1981 y se adjudicó el Nacional con Mario Kempes como figura.

En Valencia ganó una Liga y una Recopa. Dirigiendo al Real Madrid logró una Supercopa de España.

Alfredo Di Stéfano fue una leyenda, un prócer del fútbol. Marcó una época y agigantó a niveles inconmensurables la grandeza del Real Madrid, hasta convertirlo en lo que es hoy, el club más prestigioso y prestigiado el mundo.

Si Real Madrid es la Casa Blanca, Alfredo Di Stéfano fue su George Washington. Alfredo Di Stéfano fue un grande del deporte y uno de los mejores futbolistas de la historia, sin vueltas, sin rebusques, tal como era y tal como vivió y jugó la inolvidable Saeta Rubia.