Hizo "de todo" en EE.UU. y hoy tiene un restaurant en Oregón

Trabajé muchas cosas pero siempre me concentré en la comida, tengo mi restaurante chiquito, son cinco mesas adentro y dos afuera. Cocino lo que me gusta, el menú es fresco y cambia a cada rato

Empanadas hay siempre, también bife de chorizo y T-bone, que es un costeleta cortada con dos pulgadas. Yo le pongo chimichurri.

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Hacemos pastas que cambian de color. Me gusta jugar, agarro remolacha y hago pasta roja, espinaca y verde. Se llama Pablo's corner. Está en una ciudad que se llama Bandon

Conseguí un carnicero que tiene ayudantes latinos. Cría Angus. Consigo vegetales frescos en un mercado de granjeros, porque acá usan muchos químicos. Al comprar todo así, no es barato, un plato ronda los 35 dólares.

No hablo mucho español acá, mi hija tiene 11 y me cambia de español a inglés y mi esposa, que es argentina criada acá, nos reta. Tratamos de hablarlo en casa

Trabajé mucho como chef, pero nunca fui a la escuela especializada. Sí leo muchos libros. Traté de formarme, pero cuando me dijeron el precio me fui a trabajar

Llegue a California y empecé a trabajar en un Taco Bell. Trabajaba de noche y caminaba dos millas para ir. No fue fácil, extrañaba mucho Argentina. Pero si pensaba que alguien lo podía hacer y era humano, yo podía

Estuve dos semanas lavando platos en un restaurante italiano. Me gusta aprender y no me di por vencido. Hice de todo, limpie jardines, baños

Entrevista de Adrián Cragnolini.