El Gobierno creó la Agencia Nacional de Migraciones y le da poder de policía

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció este martes la puesta en marcha de la nueva Agencia Nacional de Migraciones y la Policía Migratoria para “administrar las migraciones” de manera “integral”.

Bullrich detalló que de la nueva fuerza participarán “todas las provincias, con una mirada federal”, y ponderó la mudanza de la misma del Ministerio del Interior al de Seguridad.

La funcionaria estuvo acompañada por Alejandra Monteoliva, quien la sucederá en el cargo a partir del 10 de diciembre.

Bullrich destacó que la nueva fuerza permitirá desarrollar una “mejor tarea”, porque será un organismo “desconcentrado”.

Milman respaldó la creación de la Agencia Nacional de Migraciones

El diputado nacional y exsecretario de Seguridad de la Nación, Gerardo Milman, analizó el anuncio de la creación de la Agencia Nacional de Migraciones (ANM).

En diálogo con Cadena 3, Milman reveló que él mismo había presentado un proyecto de ley a mitad de año para crear una agencia migratoria similar. En su diagnóstico, criticó duramente el sistema actual, señalando que la Dirección de Migraciones cuenta con 3.000 empleados, todos civiles, y que "el modelo no viene funcionando bien".

Milman enfatizó que la necesidad de esta transformación radica en que las fronteras argentinas son "porosas". Para ejemplificar las consecuencias de este control deficiente, mencionó el "desgraciado caso" de tres mujeres asesinadas y descuartizadas en Florencio Varela. Explicó que los ciudadanos de origen peruano implicados en el hecho "entraron y salieron del país sin quedar registrados en ningún lado", dificultando la investigación hasta el punto de que los fiscales desconocían los nombres de las personas que perseguían.

El diputado subrayó que la facilidad para cruzar la frontera es común en ciertas regiones (como La Quiaca-Villazón en Jujuy) debido a cuestiones culturales y comerciales.

El exsecretario de Seguridad argumentó que la experiencia internacional en "los países más desarrollados del mundo" indica que los puestos migratorios no son administrados por personal sin carácter policial. En el sistema actual, si un empleado de migraciones detecta un documento falso para ingresar al país, "no puede actuar" y tiene que convocar a una fuerza de seguridad.

La propuesta de Milman se alinea con un modelo internacional donde el personal que recibe el documento de ingreso al país "tiene la condición policial". Esto permitiría que, en caso de encontrar un delito, el agente pueda actuar de inmediato y poner a la persona a disposición de la jurisdicción (justicia o fiscalía) correspondiente. Milman consideró que este mecanismo es fundamental para lograr un control más efectivo en el ingreso al territorio.

Finalmente, Milman aclaró el enfoque de la agencia propuesta, la cual está diseñada para abordar los "delitos migratorios", como la falsificación de documentos o el intento de entrar ilegalmente al país. Distinguió esta actividad de los delitos complejos y el crimen organizado, como el narcotráfico. El objetivo principal de su proyecto y, presumiblemente, del que llevará adelante el Ejecutivo, es "hacer más eficiente el ingreso del país para aquellos que lo hacen de manera legal y hacerlo más difícil para aquellos que quieren entrar a delinquir".

Entrevista de “Informados, al regreso”.