La emboscada de Andrés "Cuervo" Larroque al presidente Alberto Fernández

El presidente Alberto Fernández no debe estar sufriendo una mayor deslegitimación de su poder que aquella a la que lo someten sus propios “socios” de La Cámpora, o sea del cristinismo más cerril.

El vocero de ese operativo de esmerilado es ni más ni menos que Andrés “Cuervo” Larroque, mano derecha de Máximo Kirchner.

El lunes se había cruzado fuerte con el ministro de Desarrollo Social de la Nación, Juan Zabaleta, durante un acto con Axel Kicillof y Máximo Kirchner.

Este martes fue más lejos y pegó más cerca de Alberto Fernández: redobló el apriete contra el ministro de Economía, Martín Guzmán.

Después de todo, es a él a quien el kirchnerismo duro responsabiliza por la crisis y trata de empujar afuera del gabinete.,

"Hay gente que por ahí vino sin nada y le quiere imponer a todos", lo ninguneó.

De paso, pegó un volantazo y diferenció de los dirigentes con trayectoria política y territorio, entre ellos como Zabaleta, su contendiente del día anterior.

Nadie, salvo que sea un ingenuo total, puede pensar que Larroque no representa el pensamiento de los Kirchner, madre e hijo.

Apuntó más arriba para reclamar reciprocidad de Alberto y su gobierno con Cristina.

Y dejó una frase que se presta a muchas lecturas:

Esa falta de reciprocidad “nos genera un problema político grave y por eso estamos trabados (…) La unidad no puede ser una trampa, si es una emboscada al kirchnerismo o a Cristina estamos en problemas".

¿Cómo interpretar todo esto?

Primero, la dejaron sola a Cristina en sus causas judiciales.

Segundo, deberían hacerle caso cuando pide cambio de gabinete, lo que incluye a Guzmán, y de políticas.

Tercero, no pretendan desprenderse de Cristina porque ella es la dueña de los votos.

Emboscada dijo Larroque. Es la que están tendiendo día por día al Presidente que la jefa del Cuervo entronizó y que ahora no pueden ni ver.

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