Ford Argentina homenajea a grandes referentes de su historia en el Automovilismo

Como parte de su compromiso por mantener viva la historia y reconocer a quienes la forjaron, Ford Argentina renovó la identidad de las calles internas de su centro industrial en General Pacheco. Esta acción rinde homenaje a las grandes figuras que marcaron el rumbo del óvalo en el deporte motor a nivel local y global.

Esta iniciativa se enmarca en el relanzamiento de la marca Ford Racing a nivel mundial, bajo el lema “Ready, Set, Ford”. El alto rendimiento deportivo tiene raíces profundas en la compañía, con una identidad genuina y tradiciones compartidas. Con esta acción, Ford honra el esfuerzo de quienes impulsaron su desarrollo, dejando una base sólida para las próximas generaciones.

Es parte de una historia mayor, guiada por un estándar de excelencia tanto en la manufactura como en la competición. Esa trayectoria está marcada por hitos y decisiones que fueron marcando el rumbo, pero sobre todo por personas que elevaron constantemente la vara de lo que la marca podía alcanzar. Tanto pilotos como preparadores forjaron junto a Ford una búsqueda permanente de superación, y la compañía los tiene presentes, confirmando que su legado se sustenta en el éxito, la integridad y la mejora continua.

Figuras Que Marcaron El Camino

La nueva señalización interna evoca a personalidades ligadas a Ford Racing que impactaron en la historia del automovilismo, el desarrollo de vehículos y la consagración deportiva:

La historia de Ford en Argentina no puede comprenderse sin la influencia de Juan y Alfredo Gálvez, junto a Dante y Torcuato Emiliozzi, figuras fundamentales del Turismo Carretera. La competitividad y la pasión que despertaron en miles de seguidores convirtieron sus logros en parte del ADN deportivo de la marca, dejando una huella que perdura hasta hoy.

La herencia se amplía con personalidades cuya trayectoria fortaleció el vínculo de Ford con el público argentino. Juan María Traverso, ícono indiscutido y protagonista de momentos inolvidables junto a la automotriz, y Carlos Alberto Reutemann, piloto de proyección internacional que llevó el talento nacional a la máxima categoría, son piezas clave de esta memoria colectiva.

Dentro de este recorrido histórico se destaca también Juan Manuel Fangio, uno de los máximos exponentes del automovilismo mundial. Su desempeño y logros extraordinarios trascendieron fronteras, ubicando a la Argentina en las páginas más importantes del deporte motor global.

Asimismo, el homenaje incluye a visionarios de la ingeniería y el diseño, poniendo en valor sus aportes técnicos. Heriberto Pronello, creador innovador y referente del diseño nacional, revolucionó la técnica de competición con proyectos que se adelantaron a su época. Junto a él, Oreste Berta, el “Mago de Alta Gracia”, aportó conocimiento, precisión y una visión técnica única. Reconocido por su excepcional capacidad como preparador y diseñador de motores y chasis, Berta fue fundamental en el éxito de equipos y pilotos en diversas categorías, trabajando también en la optimización de motores de producción en Pacheco con un nivel de innovación que trascendió fronteras. A este reconocimiento se suma José Miguel Herceg, el histórico preparador que dejó un legado significativo en la performance de los vehículos de competición del óvalo. Su trabajo meticuloso y su capacidad para optimizar cada componente establecieron estándares de calidad que aún hoy son referencia. Como lo fueron los 4 campeonatos de Turismo Carretera con Héctor Luis Gradassi.

A nivel internacional, Ford Argentina también rinde tributo a figuras que elevaron el estándar del automovilismo profesional. Tal es el caso de Emerson Fittipaldi, doble campeón mundial de Fórmula 1 y protagonista de hitos históricos para la marca, y de Ayrton Senna, símbolo absoluto de excelencia y disciplina, cuyas primeras experiencias en la Fórmula 1 estuvieron ligadas a los motores Ford, formando parte de un capítulo muy valorado en la historia de la competición.

El espíritu de innovación y performance está representado por Carroll Shelby, una de las figuras más influyentes en la cultura automotriz global. Su visión dio vida a vehículos icónicos como el Shelby Cobra y fue clave en el desarrollo de los Ford Mustang Shelby GT350 y GT500, versiones que alcanzaron niveles de performance legendarios y se establecieron como íconos culturales.

Cada una de estas calles representa una historia, una trayectoria y un aporte invaluable. Estos nombres reflejan los valores que siguen guiando a la compañía: pasión, innovación, compromiso y liderazgo. Ford continúa avanzando con la mirada puesta en el futuro, honrando a quienes sentaron las bases de su historia.