La tendencia del color en el diseño de interiores: más allá de las paredes

El minimalismo, que dominó el diseño de interiores en años recientes, ha comenzado a dar paso a una nueva tendencia que se caracteriza por la incorporación de colores vibrantes y espacios más acogedores. Esta tendencia, conocida como color drenching, ha cobrado fuerza entre los propietarios que buscan personalizar sus hogares de manera audaz.

El color drenching invita a los dueños de casa a ir más allá de las paredes y a aplicar colores intensos en techos, molduras, suelos y hasta en electrodomésticos. La idea es crear un ambiente envolvente donde el color se convierta en el protagonista del espacio. Esta técnica no solo busca embellecer, sino también aportar una sensación de calidez y confort.

Los expertos en diseño aseguran que, lejos de resultar estridente, el uso de colores audaces puede resultar armonioso y atractivo. La clave está en elegir una paleta de colores que se complemente y en aplicar los tonos de manera estratégica. Por ejemplo, un techo pintado de un color intenso puede hacer que una habitación parezca más alta, mientras que un suelo de un tono oscuro puede aportar profundidad.

Además, el color drenching permite a los propietarios expresar su personalidad y estilo a través de sus espacios. En lugar de conformarse con un esquema de colores neutros, los dueños de casa están optando por combinaciones que reflejan sus gustos y preferencias. Esta tendencia se ha visto impulsada por la búsqueda de ambientes más personalizados y únicos.

En conclusión, el color drenching se presenta como una alternativa refrescante al minimalismo, permitiendo a los propietarios de viviendas crear espacios vibrantes y llenos de vida. Con la asesoría adecuada, el uso de colores audaces puede transformar cualquier hogar en un lugar acogedor y lleno de carácter.