Una mujer como anzuelo, en el centro de un crimen

El pasado domingo a la madrugada, Alejandro David Ortíz (26) murió apuñalado en barrio Hipódromo, en la zona oeste de la ciudad de Río Cuarto.

Casi de inmediato al crimen, fue detenido Claudio Miguel Ángel Alfaro (34), quien también presentaba heridas de arma blanca.

Un homicidio en ocasión de riña. Ambos tenían antecedentes penales. De esta manera, se divulgó en ese momento el corolario de la investigación policial que lleva adelante el fiscal Fernando Moine.

En la escena del crimen había otros dos heridos: el hermano de la víctima fatal, Sergio Daniel Ortíz (26) y la novia de este, Tania Soledad Irusta (22).

En total, se secuestraron dos cuchillos y una navaja.

Pero con el correr de las horas, los sabuesos de Investigaciones Criminales de Río Cuarto comenzaron a esbozar una hipótesis más elaborada sobre cómo habría sucedido realmente todo. Y terminaron por diagramar una historia en la que se entremezclan la inseguridad y la violencia urbana.

De acuerdo a esta reconstrucción, a la que tuvo acceso Cadena 3 a través de diversas fuentes, el pasado domingo a la madrugada, Alfaro había quedado en encontrarse en la esquina de Presidente Perón y Marcos Lloveras con la joven Irusta. Una cita, dijo el ahora detenido.

"Una viuda negra", asumió un investigador. Se sospecha, siempre de acuerdo a este teoría, que la joven fue utilizada como un "anzuelo" para asaltar a Alfaro. O para intentar saldar alguna cuenta pendiente aún inconfesable.

Sucede que apenas se encontraron Alfaro e Irusta, irrumpieron en la misma esquina los hermanos Ortíz y otros dos muchachos, todos con armas blancas. "Me quisieron robar", les alcanzó a decir Alfaro a los policías cuando lo llevaban detenido. "Y me defendí", agregó, dejando expuesto en aquel mismo momento cuál será su principal argumento para intentar contrarrestar la acusación del fiscal.

Alfaro, se sostiene en la causa, al verse rodeado por el grupo de jóvenes, también extrajo un cuchillo de entre sus ropas. 

El resultado de la pelea ya quedó escrito: uno de los hermanos Ortíz terminó muerto; y la víctima del supuesto robo, detenida, acusado del asesinato.

Informe de Juan Federico.