Siete de cada diez cordobeses no se mudarían del lugar donde viven
11/11/2025 | 12:01Redacción Cadena 3
Hay una pregunta que parece simple, pero que dice mucho: ¿Usted se mudaría? No de casa —no necesariamente—, sino de entorno, de barrio, de ciudad, de pueblo. La consultora Delfos se la hizo a los cordobeses y la respuesta fue contundente: el 72,7% no se mudaría del lugar donde vive.
Esa cifra encierra una forma de estar en el mundo. Lo explicó Luis Dall'Aglio, director de la consultora: en Córdoba existe "una característica muy fuerte, casi idiosincrásica, de quedarse en el lugar donde uno nació, donde se crio, donde están los amigos". En otras palabras, hay una noción de pertenencia territorial y afectiva que pesa más que la búsqueda de nuevas oportunidades o mejores condiciones habitacionales.
El dato se replica en distintos niveles. En encuestas anteriores sobre comportamiento inmobiliario, un 80% de los cordobeses afirmó que, si pudiera mejorar su vivienda, elegiría hacerlo en el mismo barrio. Y es que Córdoba tiene una tradición de barrios con identidad propia, donde las costumbres, los lazos y las rutinas cotidianas moldean tanto como el paisaje.
Mudarse, para muchos, no es solo cambiar de techo: es romper una trama de vínculos. En la capital provincial, incluso las divisiones entre zonas norte y sur parecen marcar límites invisibles que pocos están dispuestos a cruzar.
Entre el 27% que sí se mudaría, Villa María aparece como la opción más atractiva, seguida por Córdoba capital y, algo más atrás, Traslasierra. Pero son minoría. La mayoría prefiere quedarse cerca del carnicero de siempre, del almacén conocido, del amigo de la esquina.
Este apego no se reduce al confort o al miedo al cambio. Es, más bien, una afirmación de identidad. En tiempos en que la movilidad y la globalización parecen valores dominantes, Córdoba ofrece una contracara: la fidelidad al territorio.
Tal vez por eso, los que sí se mudan —ya sea por trabajo o necesidad— suelen hablar del desarraigo como de una herida. Y quienes llegan desde otras provincias, encuentran aquí una comunidad que, sin perder su espíritu localista, sabe recibir al que viene de afuera.





