Álvaro Soldano, subgerente de Aplicaciones y Productos de la Gerencia de Observación de la Tierra de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), explicó a Radioinforme 3 en qué consistirá la misión del satélite argentino SAOCOM 1B que se lanzará próximamente desde Cabo Cañaveral, en Estados Unidos, a través de la empresa Space X.
El SAOCOM 1B es gemelo del SAOCOM 1A -que está en órbita espacial desde hace dos años- y según indicó Soldano, con este lanzamiento se potenciarán las posibilidades de observación de la Tierra de ambos satélites.
“Todo lo que hacía el 1A queda duplicado, los tiempos se acortarán y la posibilidad de adquirir información con imágenes satelitales se duplicarán”, detalló.
El instrumento principal de este satélite se construyó en Córdoba, con mano de obra nacional y tiene más de 3 mil kilos, casi 5 metros de altura y una antena del tamaño de un colectivo urbano.
“Esto es parte del esfuerzo de muchos años que da frutos. Argentina se ha puesto en un buen nivel de desarrollo satelital”, destacó Soldano.
La misión del SAOCOM 1A fue de mucho aprendizaje y el 1B que es gemelo al anterior potenciará esas posibilidades de observación de la Tierra
En cuanto a su aplicación, enumeró:
- Aportar información al productor agropecuario sobre humedad del suelo y control de plagas
- Aportar información para prevenir, monitorear, mitigar y evaluar catástrofes naturales o antrópicas
- Mejorar las decisiones de manejo sobre los cultivos
“Son muchas las aplicaciones para un país tan amplio como el nuestro”, valoró.
Cabe recordar que los satélites SAOCOM cuentan con antenas radar, un instrumento activo que trabaja en la porción de las microondas en banda L de espectro electromagético, que los diferencia de otros que utilizan imágenes ópticas.
Lanzamiento
Se estima que su lanzamiento será a fines de julio, pero Saldano aclaró que “se toma una ventana temporal de algunos días”, para analizar “cuál es el mejor momento”.
“Está totalmente probado, ya se ha ido todo un equipo de argentina. Hay gente de CONAE y de Invap y está todo listo para que dado el momento de ser lanzado, el satélite esté en las mejores condiciones”, concluyó.
“Se aplicó un protocolo muy estricto y la gente que viajó tuvo que mantenerse en cuarentena en Estados Unidos una semana y recién ahí pudo ponerse en contacto con el satélite para ver las condiciones en las que estaba y hacer nuevamente las pruebas”, apuntó.
Entrevista de Miguel Clariá
