El domingo a la madrugada un joven de 17 años atacó ferozmente un kiosco porque el dueño se negó a venderle un vino por ser menor de edad. El local se ubica en Buenos Aires, casi esquina San Lorenzo, cerca del Paseo del Buen Pastor.

En un primer momento, cuando el adolescente comenzó a agredir al dueño y a algunos clientes, Emanuel, el dueño, decidió darle el vino para que se fuera. Cuando se estaba yendo se le cayó la botella al piso y exigió que le dieran otra, a lo que el dueño se negó. Entonces comenzó a golpear las instalaciones, a dar patadas y trompadas, sacó una de las rejas y rompió los vidrios y algo del interior del local.

“Rompió todos los vidrios y se lastimó también él. Estaba todo ensangrentado”, contó Emanuel a Cadena 3.

Emanuel siguió al descontrolado joven durante unos 100 metros, donde encontró un control policial y les pidió a los efectivos que lo detuvieran.

“Se puso a pelear con la Policía también. Les costó controlarlo”, detalló el propietario.

Lo más insólito del caso es que, en la noche del domingo, el muchacho volvió al quiosco a comprar alfajores, como si nada, y solicitó los datos del local para reclamar por las lastimaduras que se había ocasionado.