"Tenemos que salir a vendernos al mundo"

Según el cabañero santafesino, se están viendo para la ganadería muy buenas perspectivas para los próximos años. 

Creo que tenemos que salir a vender al mundo y tenemos que mostrar el mejor Braford del mundo (que hoy lo tenemos y los estamos viendo).

En cuanto al cambio que le imprimió al mercado la llegada del crédito, reconoce que 

el crédito es lo que hacía falta para tratar de mover un poco el mercado. 

Además, opinó que la gente está acostumbrada (en el negocios de la cabaña y de la genética) a invertir a largo plazo. 

"Yo estoy convencido que el valor de un toro hay que dividirlo, ya que se amortiza en 5 años y en esos cinco años va a tener probablemente 30 terneros, o sea que son 150 terneros la amortización de un toro. Entonces a veces hay que tratar de elegir el toro que uno va a buscar y no mirar tanto el precio, porque esa amortización va a ser larga y cualquier pequeño diferencial en precio en 150 terneros por la calidad para pagar ampliamente dos o tres veces el valor que nosotros teníamos pensado en el toro". 

"Todas esas herramientas son las que hay que pensar usar porque la genética (tanto la buena genética o la mala genética) quedan por muchos años nuestros rodeos, hay que aprender a entenderlo y hay que salir a buscar la herramienta que uno necesita".

Creo que están dadas las condiciones. Están dado el clima como país para el futuro y bueno, pensando siempre en que nuestra carne este tiene que estar en Arabia Saudita, en Dubai, en todos lados del mundo

ADN Braford 

Remondino admite que siempre han buscado un Braford bastante menos “asebusado” de lo que se usa en otros lados, que es una herramienta que permite la raza. Desde Carrizales (Estación Clarke, plena zona agrícola del sur santafesino), ellos siguen apostando a la ganadería.

"Eso nos permite tener terneros de mucha más calidad carnicera, con muy buenos cuartos, muy buenas áreas de ojo de bife, con muy buena circunferencia y al tener tantos años trabajando la raza, (nosotros desde los 90 que ganamos la primera campeona de Palermo) tenemos una genética que imprime mucho". 

La clave de la posventa 

"Y después tratamos de visitar a los clientes y seguirlos por cualquier duda, saben que nos llaman para para lo que podamos ayudar. Somos apasionados por esta actividad. Yo soy veterinario y tengo la pasión de la ganadería en la sangre. Además, el tema de la posventa es una herramienta importante para poder seguir al cliente, para poder también resolver eventualmente algún problema y estar al pie de las necesidades. Eso es fundamental, de hecho, a mí me llama gente que compró un toro hace 5 años y que ese toro está viendo que puede que le puede pasar y bueno, lo vamos a visitar. Vamos a tomar unos mates. Charlamos un rato, vemos el rodeo. Yo siempre digo decime qué producto querés tener y qué vaca tenés y yo te voy a decir qué toro te puede servir de lo que yo tengo y si lo que yo tengo no te sirve, te lo admito. Te lo voy a decir, mira, fíjate porque tengo otros colegas y te pueden dar esta herramienta".

Finalmente, Remondino cierra con su lema: 

la ganadería es un negocio en el que ganamos todos, pues gana el país: la gente, el ama de casa, arraiga la gente en el campo, o sea, realmente es una muy linda actividad.