Los Palmeras: eran mejores amigos y resultaron ser hermanos

Una historia de película

Los Palmeras: eran mejores amigos y resultaron ser hermanos

15/06/2019 | 07:51 |

Marcos Camino, uno de los creadores de la banda, conoció a Miguel Ocampo en el colegio y se hicieron inseparables. A los 20 años se enteraron de que compartían algo más que su amistad.

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Marcos Camino y Miguel Ocampo se conocieron cuando tenían 9 años. A Marcos lo habían cambiado de colegio y el primer día de clases que compartieron juntos se dieron cuenta que compartían más cosas de las que creían: ambos eran hinchas de Colón y ambos estaban enamorados de la misma compañera de curso.

Con el paso del tiempo se volvieron inseparables aunque no se imaginaban la sorpresa que les tendría el destino.

Ambos nacieron en Santa Fe. Marcos vivió con su papá biológico hasta los cuatro años, cuando sus padres se separaron y se fue a vivir con su mamá. Por su parte, Miguel fue criado por su madre y la pareja de ella, quien le dio su apellido.

“A mí me cambian de colegio, llegué a una escuela y me voy a sentar con ese pibe (…) Nos hicimos amigos, los dos teníamos padrastros, éramos hijos de padres separados pero no nos íbamos a imaginar que a los 20 años éramos como hermanos”, relató a Cadena 3 Marcos Camino.

Sobre cómo se enteraron que eran hermanos, el cantante contó: "Nos enteramos por intermedio de mi papá que no vivía conmigo. Él primero tuvo contacto con Miguel, charlaron y él le dijo que era el papá y después le comentó de mi y obviamente que me conocía y al otro día me enteré".

"Me contó la historia esta y Miguel ya se había ido a Buenos Aires y no nos vimos hasta un año después", agregó.

Cuando Miguel se enteró que su hermano iba a tocar en un show, no dudó ni un segundo en ir a verlo. Marcos todavía no era parte de Los Palmeras, grupo que fundaría unos años después junto a Rubén “Cacho” Deicas.

Hubo un momento, entre una canción y otra, que lograron verse y no se dijeron nada: simplemente se fundieron en un abrazo sincero.

"Nosotros seguimos siendo más amigos que hermanos. En un momento lo hablamos porque teníamos más años de amigos que hermanos y quedamos como sorprendidos los dos de la situación", sostuvo Marcos.

Ambos siguieron por caminos separados pero nunca más perdieron el contacto. Miguel se instaló definitivamente en Buenos Aires y se dedicó al rubro textil. Tuvo un hijo que ahora toca el teclado y sueña en ser como su tío. Marcos, en cambio, recorrió el mundo entero junto a Los Palmeras.

“Nos une la bondad, la música y Colón. Si bien no nos vemos como en la adolescencia las charlas que tenemos ahora son más nutritivas”, reconocieron los dos.

Entrevista de Una mañana para todos