Sociedad
12/10/2017 | 10:02 | Los edificios amenazados fueron la terminal de ómnibus salteña; la Escuela Técnica “Albert Einstein”, el ex Colegio Nacional y el Scalabrini Ortiz. Por los hechos, tres jóvenes fueron detenidos.
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Efectivos policiales y de Bomberos evacuaron los edificios (Informe de Elisa Zamora).
Tres jóvenes fueron detenidos ayer por haber realizado llamadas amenazando de bomba a la terminal de ómnibus y tres importantes colegios secundarios de la ciudad de Salta, informó la policía.
Fuentes policiales informaron que se registraron tres llamados al sistema de emergencias 911 sobre amenazas con explosivos, de los cuales el primero ocurrió a las 7.34; el segundo a las 8.26 y el tercero a las 10,14.
Los edificios amenazados fueron la terminal de ómnibus de la ciudad de Salta; la Escuela Técnica “Albert Einstein”, ubicada en la intersección de las calles Tucumán y Buenos Aires; el ex Colegio Nacional, situado en la calle General Güemes 40; y el Scalabrini Ortiz, en San Martín 1767.
Esto derivó en un amplio despliegue de efectivos de áreas operativas y específicas, como los bomberos especialistas en explosivos, que evacuaron simultáneamente la terminal y a todos los docentes y alumnos de la escuela técnica, para después hacer lo propio en el ex Colegio Nacional.
Además, durante los tres operativos se restringió el acceso a la manzana que rodean a los edificios públicos involucrados, mientras los especialistas revisaban las instalaciones amenazadas, en las que no hallaron artefactos explosivos.
A partir de allí, las pesquisas realizadas por el Grupo Investigativo del Sector 2 permitieron dar con dos jóvenes mayores de edad, sospechosos de haber realizado las llamadas.
La Fiscalía Penal 2 se hizo cargo de la investigación y ordenó la detención de ambos jóvenes por el delito de intimidación pública agravado por amenaza de bomba.
El comisario mayor José Hinojosa, titular del Centro de Coordinación Operativa de la Policía salteña, advirtió que este tipo de delitos está contemplado en el Código Penal con penas de entre dos y seis años de prisión efectiva.
Hinojosa destacó que es importante el uso responsable del sistema de emergencias 911, ya que una llamada falsa moviliza un sinfín de recursos humanos y materiales que podrían estar atendiendo una urgencia real.
Informe de Elisa Zamora.