Nueva movilización de jubilados y sindicatos contra el ajuste del gobierno

Organizaciones de jubilados, colectivos de personas con discapacidad, sindicatos, movimientos sociales, organismos de Derechos Humanos y asambleas barriales se prepararon para salir a las calles este miércoles, en una nueva manifestación de descontento social frente a las políticas de ajuste y la represión del gobierno de Javier Milei. 

La cita fue programada para las 15 horas frente al Congreso, desde donde los manifestantes marcharían hacia la Plaza de Mayo para expresar su rechazo a los anuncios presidenciales de veto a leyes aprobadas por el Congreso, que incluían aumentos en las jubilaciones, la prórroga de la moratoria previsional y la emergencia en discapacidad.

/Inicio Código Embebido/

La movilización se enmarcó en la concentración habitual que, semana tras semana, realizan los jubilados en la Plaza de los Dos Congresos. Desde hacía meses, la instalación de vallas y un fuerte operativo de seguridad habían impedido que los manifestantes llevaran a cabo sus tradicionales rondas, semaforazos y radios abiertas. Sin embargo, los organizadores insistieron en que «las plazas no se abandonan, porque son símbolo de lucha y memoria».

Entre los sindicatos que confirmaron su participación se encontraban el Sindicato del Neumático (SUTNA), la Asociación Gremial Docente de la UBA (AGD), Ademys, seccionales combativas del Suteba y la Junta Interna de ATE del Hospital Garrahan. También se esperaba la presencia de las dos CTA, lo que representaba una nueva muestra del sindicalismo que resistía los recortes en el Estado y el deterioro de las condiciones laborales.

Al llegar a la Plaza de Mayo, frente a una Casa Rosada cada vez más protegida por rejas y fuerzas de seguridad, se leería un documento conjunto que expresaría el repudio a la política de exclusión del gobierno y reivindicaría el derecho a la protesta.

«Salimos a la calle en defensa irrenunciable de nuestros derechos a la salud, la alimentación, el ocio», indicaron las agrupaciones de jubilados en su comunicado, que convocaban a una “marcha antirrepresiva y contra el veto”. “No permitiremos más ataques a los sectores más vulnerables ni la criminalización de la protesta social. Marchamos en rechazo a la represión y contra el veto a las leyes sancionadas por el Congreso sobre el haber jubilatorio, la moratoria y la emergencia en discapacidad”, añadieron.

Entre las principales demandas se encontraban el “cese inmediato de la represión”, el rechazo al protocolo antipiquetes de Patricia Bullrich y la anulación de los vetos presidenciales. También se planteaba un rechazo al acuerdo del gobierno con el Fondo Monetario Internacional, que consideraban el trasfondo del ajuste. “No al pago de la deuda externa”, concluyeron.

La jornada se anticipaba como una nueva representación del creciente descontento que afectaba a amplios sectores de la sociedad, especialmente a aquellos más afectados por la política de ajuste y desmantelamiento del Estado.