Sociedad
28/07/2017 | 06:47 | Comenzó ayer el juicio por el caso del chico que murió electrocutado en diciembre de 2009. El dueño de un local de motos y un electricista están imputados de homicidio culposo.
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"Mi defendido no tiene ninguna responsabilidad", dijo Aníbal Zapata (defensor).
Se negaron a declarar este jueves los dos acusados de homicidio culposo por la muerte de Juan Aciar en diciembre 2009 en la ciudad de Córdoba.
Se trata del electricista Adrián Molina y el comerciante Diego Nievas, propietario del local de motos Appia.
En diálogo con Cadena 3, Aníbal Zapata, defensor de Molina, dijo que su cliente es inocente y que no fue quien hizo la instalación eléctrica.
"Mi defendido no tiene ninguna responsabilidad en este hecho que se le acusa", afirmó y dijo que esperan que se pueda "dilucidar qué ha pasado verdaderamente con este hecho desgraciado y doloroso".
El próximo lunes, a las 11, comenzarán a ser convocados los testigos del caso.
El fatídico episodio ocurrió el 23 de diciembre de 2009 cuando Sandra Meyer y sus hijos fueron a observar la correntada que se había formado tras la lluvia en la calle Javier Díaz en un río.
Juan, el único hijo varón de la familia Aciar, le preguntó a su mamá si podía ayudar a un anciano que llevaba dos bolsas en las manos y tenía dificultades para cruzar la avenida Riccheri.
Cuando el adolescente se acercó al anciano se apoyó en el cesto de basura e inmediatamente recibió una descarga eléctrica.
Su madre intentó sacarlo, pero también recibió una terrible descarga.
Ella intentó reanimarlo dándole golpes en el pecho y haciéndole respiración boca a boca. Por un instante, logró que el joven tosiera, pero horas más tarde, ya el 24 de diciembre, Juan murió en una clínica.
Según Sandra Meyer, madre de Juan y fundadora de la organización Relevando Peligros, el electricista, quien se encargó de realizar la instalación eléctrica para iluminar un cartel de motos, no contaba con un disyuntor.
“Habían hecho una rienda de alambre al cesto de basura y otro al alumbrado público. La instalación venía desde el inmueble por lo que Nievas, quien estaba a cargo de la concesionaria de Motos Appia, está imputado junto con Molina, de homicidio culposo”.
Por su parte, el fiscal de Cámara Sergio Ruiz Moreno señaló: “Un mes antes el encargado del negocio, Diego Nievas, le había pedido al electricista Marcelo Molina que hiciera las reparaciones, incluidas las del cartel, y por eso va a tener que responder, porque la hipótesis acusatoria es que los trabajos fueron mal hechos, incumpliendo normativas de seguridad mínimas”.
Informe de Francisco Centeno.