Felicidad: los jóvenes registran los valores más bajos en los últimos ocho años

La felicidad de los argentinos volvió a caer y alcanzó su nivel más bajo en los últimos ocho años. Solo el 48,3% de las personas encuestadas afirma sentirse feliz con su vida, según el informe correspondiente al segundo semestre de 2025 elaborado por el Observatorio de Tendencias de Insight 21, el think tank de Universidad Siglo 21.

El estudio muestra una disminución del 2,6% respecto del primer semestre de este año cuando la felicidad alcanzaba el 50,9% y una baja aún mayor en comparación con el último semestre de 2024, cuando el indicador registraba 54,5%.

La tendencia negativa se sostiene pese a que algunos indicadores muestran leves mejoras en la conformidad general con la vida: el 33,1% de los encuestados afirma estar conforme con la mayoría de los aspectos de su vida y la misma proporción sostiene que no cambiaría nada si pudiera vivirla nuevamente.

El relevamiento, realizado en siete ciudades del país, analiza la evolución del bienestar emocional considerando diferencias por edad, género y nivel educativo, y confirma que la caída del índice global afecta a todos los segmentos, aunque con particular intensidad entre ciertos grupos.

En cuanto a las diferencias de género, hombres (49,5%) y mujeres (47,4%) presentan niveles de felicidad similares, aunque ambos muestran bajas respecto de inicios de 2025. La disminución fue más marcada en mujeres, donde el indicador retrocedió 3,7%.

La franja etaria más joven vuelve a registrar los valores más preocupantes: solo el 43,3% de quienes tienen entre 18 y 29 años se considera feliz, reafirmando una tendencia que se mantiene desde años anteriores.

En contraste, las personas de entre 50 y 59 años fueron las únicas que exhibieron una mejora: su felicidad aumentó 8,7%, alcanzando uno de los valores más altos de toda la serie histórica.

El estudio también aporta variaciones según el nivel educativo. La felicidad cayó en todos los grupos, excepto entre quienes cuentan con estudios primarios completos, donde se registró un sorprendente incremento del 16,3% (de 52,9% a 69,2%).

La mayor caída se observó entre las personas con posgrado: solo el 50% se considera feliz, un descenso del 19,4% respecto del primer trimestre de 2025.

“Medir la felicidad en la población permite comprender el estado de bienestar emocional y social. Es un indicador clave para el desarrollo humano sostenible que ayuda a anticipar desafíos y orientar decisiones tanto del sector público como del privado”, señaló Florencia Rubiolo, directora de Insight 21.

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“Con niveles que se ubican entre los más bajos en casi una década, los resultados del informe destacan la necesidad de diseñar políticas públicas y estrategias organizacionales que fortalezcan el bienestar emocional, la salud mental y la calidad de vida”, concluyó.