Iban a ser vendidos en Brasil y Europa
27/04/2011 | 09:59 | Se detuvo a un ciudadano chileno que intentaba ingresar al país los restos, en el marco de un procedimiento que se realizó en el paso fronterizo Cardenal Samoré, que une Argentina y Chile.
La Aduana detectó el contrabando de 310 dientes de tiburón fosilizados, valuados en el mercado negro en más de u$s 100.000.
Se detuvo a un ciudadano chileno que intentaba ingresar al país los restos fósiles, en el marco de un procedimiento que se realizó en el paso fronterizo Cardenal Samoré, que une Argentina y Chile.
Se estima que las piezas iban a ser comercializadas en Brasil y Europa Oriental.
Los restos fósiles fueron descubiertos en el puesto aduanero del Resguardo El Rincón, que controla el Paso Internacional Cardenal Samoré - provincia de Neuquén - mediante la utilización de scanners que permitieron observar piedras graníticas de distintos tamaños en un equipaje de mano.
Al abrirlo, el nerviosismo del pasajero fue tan evidente, que se le solicitó vaciar los bolsillos de su campera, donde se encontraban las piezas antes mencionadas. Los agentes también hallaron restos adheridos al cuerpo del involucrado.
Las piezas decomisadas pertenecerían al Patrimonio Cultural de Chile, y habrían sido extraídos del yacimiento paleontológico de la ciudad de Caldera, ubicada al norte del país vecino.
Cabe informar, que la Ley de Patrimonio Arqueológico y Paleontológico prohíbe el traslado de materiales arqueológicos o paleontológicos para cualquier finalidad, dentro del territorio nacional y su exportación, sin la previa autorización del organismo donde estén radicados los materiales.