¿Por qué decirles sí a las vacunas?

Salud

¿Por qué decirles sí a las vacunas?

21/08/2018 | 09:04 |

Conocer cuál es su importancia y no dudar de su eficacia resultan puntos clave.

Las vacunas son una de las herramientas de salud y prevención que mayor beneficio producen, tanto de forma individual como colectiva, previniendo enfermedades que años atrás causaban grandes epidemias. A través de ellas, se logró erradicar la viruela y disminuir notablemente los casos de enfermedades frecuentes que causaban complicaciones en niños y adultos, tales como la poliomielitis, el sarampión, la rubéola, la difteria, el tétanos, la hepatitis B, o las meningitis por meningococo, entre otras.

Las vacunas contienen versiones debilitadas de un virus, versiones que se asemejan a un virus o una parte de las bacterias, los cuales se denominan antígenos. La presencia de ellos estimula al sistema inmunológico creando anticuerpos, los cuales lo protegen de virus o bacterias a las que pudiera estar expuesto en un futuro. La respuesta inmunológica originada por las vacunas es similar a la de la infección natural, pero en la inmensa mayoría, sin peligro para el paciente.

Las vacunas no sólo protegen a las personas que se las colocan, sino también a aquellas no
vacunadas o susceptibles de contraer ciertas enfermedades.

Paneles de expertos han confirmado en repetidas oportunidades que las vacunas que hoy conocemos son mucho más seguras que las utilizadas tiempo atrás: antes de su aprobación y autorización final deben pasar por diversas pruebas de seguridad y eficacia. Algunos niños que reciben vacunas pueden experimentar ciertas reacciones. Las más comunes son locales: enrojecimiento, dolor o inflamación en el lugar de la inyección. En algunos casos, también pueden tener fiebre, pero no elevada. Cuando se producen dichas manifestaciones, la mayoría de las veces son leves y duran poco tiempo. Pero siempre los riesgos son mucho menores que los beneficios.

Lamentablemente, en los últimos años surgieron grupos que cuestionan uno de los mayores avances de la salud mundial. Son conocidos como el movimiento antivacunas. Esto se ha convertido en una amenaza para la salud pública, resurgiendo enfermedades que pueden ser fácilmente prevenibles mediante la vacunación. Un ejemplo de esto es el brote sin precedentes de Sarampión en países de Europa, como Italia y España, y probablemente tenga que ver con la aparición de casos autóctonos en la Ciudad de Buenos Aires, lo cual ha desatado una alerta en el país. Por este motivo, tanto el Ministerio de Salud de la Nación como el de dicha Provincia comenzaron con una fuerte campaña para incentivar el cumplimiento del plan de vacunación obligatorio, con especial énfasis en su importancia sanitaria y en la gratuidad del mismo. En este marco, resulta significativo destacar la incorporación de las siguientes vacunas al Calendario Nacional.:

Niños y adolescentes:

Adultos:

La vacunación es un acto de responsabilidad individual que también tiene un inmediato y fuerte impacto social: cuidar al otro.

De allí que haya circulado con tanta fuerza entre especialistas y público en general el concepto de "efecto rebaño": cada vez que nos vacunamos no sólo nos protegemos de manera individual, sino que también contribuimos a disminuir la circulación de la enfermedad en otras comunidades que no hayan recibido la inmunización.