Internacionales

América Latina, me falta esa bolilla

03/12/2014 | 10:21

Encuentro de corresponsales extranjeros con Pedro Sánchez, el nuevo secretario general del Partido Socialista Obrero español.

Alrededor de treinta colegas de los cuatro continentes aguardan expectantes las definiciones de una de las figuras emergentes del panorama político ibérico.

Cadena 3 inicia la ronda de preguntas pidiéndole su opinión sobre América Latina y la estrategia que llevará a cabo en la región en caso de llegar a la presidencia del Gobierno, agregándole que si es conocedor del cambio político registrado en las ultimas décadas y de la imagen de España en la zona, a veces cuestionada por la actuación de las empresas que desembarcaron allí.

La respuesta del líder socialista descoloca a la calificada concurrencia. Dice que conoce la situación de miles de jóvenes españoles que debido a la crisis han tenido que emigrar a países como Argentina, Chile, Brasil...y que su compromiso será apoyarles para que puedan labrarse un futuro allí. Final de la respuesta.

Tras dos segundos de estupor, un corresponsal inglés le repregunta, salteándose el orden, si eso es todo lo que tiene pensado hacer en la región.

Sánchez agrega entonces que estar junto a los exiliados ayudará a cambiar la imagen negativa que las empresas españolas han podido generar en Latinoamérica.

La prensa del Cono Sur se cruza miradas de asombro, hasta que unos minutos más tarde, la corresponsal de la Agencia France Presse, vuelve sobre nuestra pregunta inicial, porque le parece insuficiente la respuesta dada. Entonces el líder socialista recurre a un argumento del manual de las frases hechas: “Tendremos las mejores relaciones posibles con todos los países de América Latina”.

Tal vez pueda servir de atenuante que Pedro Sánchez había tenido una mañana muy intensa en el Congreso de los Diputados en un debate tórrido sobre la corrupción y que sin pausa había llegado al Centro Internacional de la Prensa para este encuentro. También podemos excusarle cierta bisoñez – apenas lleva cuatro meses en el cargo – en el manejo de temas por el momento periféricos a su función, como las Relaciones Internacionales, dado que la profunda crisis nacional le exprime todas sus energías.

Aún así, no deja de resultar llamativo que Sánchez no tenga una opinión más sólida sobre el subcontinente donde España ha sido y es uno de los principales actores, económico, social, cultural y evidentemente afectivo.

Más todavía si, como anticipó en esa reunión, tiene previsto visitar nuestros países en enero próximo.

Sería recomendable que antes de ese viaje repasara los apuntes, porque una vez cruzado el charco, esa bolilla que hoy tiene pendiente le sale seguro.