El mural fue pedido y aprobado por las autoridades (Por Miguel Clariá)

Insólita censura

"Violencia simbólica": taparon mural de un feto en el Piñero

24/12/2019 | 08:09 | La obra había sido pedida y aprobada por la dirección del hospital. "Me pidieron que lo borrara y yo no podía autocensurarme", dijo la artista porteña Liset Feider a Cadena 3.

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El mural fue pedido y aprobado por las autoridades (Por Miguel Clariá)

El pasado 6 de diciembre Liset Feider, una artista porteña, dejó terminados tres murales en el Hospital Piñero, de barrio Flores, de la ciudad de Buenos Aires. Los mismos habían sido donados por la artista pero previamente autorizados por los directivos del nosocomio.

Si bien en un primer momento, las reacciones fueron positivas y de agradecimiento, todo cambió con el paso de los días.

Las mismas personas que habían aprobado los bocetos, le enviaron un mensaje solicitándole que modificara el dibujo, aludiendo que estaban teniendo "muchos problemas" con el mismo.

"Cuando lo terminé, la dirección subió las fotos de los murales a las redes y me agradeció. Hasta ahí, no había ningún problema. Todavía intento entender los argumentos porque me dijeron que las imágenes ejercen violencia simbólica sobre la mujer. El director me dijo que lo estaban presionando", dijo a Cadena 3 Liset Feider, artista.

La obra consistía en tres murales: uno en el hall de espera del hospital que representa a una mamá con un niño, otro en la fachada que muestra a una mamá embarazada y un tercero, también en la fachada, que es un homenaje a un niño por nacer. Este último fue el que desató la polémica.

"Creo que carece de toda lógica. Son presiones del sector. Ha cobrado una relevancia y un simbolismo que ahora es imparable", sostuvo.

En un primer momento, la artista accedió a modificar el color del cordón umbilical -antes era de color celeste-. "Hasta ahí, fui flexible pero después me dijeron que el bebé debía desaparecer. Ahí les dije que no podía autocensurarme y que lo taparan ellos".

A los días, el mural apareció tapado con una tapia de madera encima.

"Nadie me llamó para consultarme. La decisión la habían tomado y quiero creer que debajo de esas maderas está la obra", finalizó.

Entrevista de Miguel Clariá.