Grababus negó deuda y apuntó contra la Provincia

Jorge Sorensen, titular de Grababus -la firma encargada del grabado de autopartes en Córdoba - negó que su empresa tenga deudas y apuntó contra la Provincia por la decisión de rescindirle el contrato, con la suspensión de sus tareas.

La firma fue denunciada por el Gobierno de Córdoba al detectar una evasión impositiva por más de 40 millones de pesos y una serie de maniobras para desviar operaciones a otras empresas.

"Yo no evadí nada", aseveró Sorensen a Cadena 3, y aseguró que hay "una cuestión administrativa dentro del Ministerio de Finanzas".

"Se me hizo un reclamo por el impuesto de sellos y una diferencia en Ingresos Brutos. A eso contestamos en cada una de las instancias", afirmó y aclaró que el contrato estaba en pesos y "no se podía calcular cuánto es lo que se iba a gravar".

Además, destacó que hizo una inversión al modificar "todas las plantas de verificación de Córdoba".

"Nadie dice que a través de la firma Grababus, con una inversión millonaria que yo realicé se hicieron todas las mejoras (en las plantas de verificación", apuntó.

"Yo jamás evadí porque el que cobraba era el Gobierno de Córdoba. Usted iba pagaba, el Gobierno cobraba y después me pagaba a mí".

Y agregó: "Puse 150 personas en un momento en que nadie hacía una inversión en Córdoba y ponía tanta gente a trabajar con un sueldo mejor que la media, por la misma actividad".

"Este Gobierno es sordo porque no escuchó que 20 veces le dije que el CESVI dijo que es una medida que brinda una herramienta fundamental para las fuerzas de seguridad para evitar el robo y la aniquilación de desarmaderos clandestinos. El Registro de la Propiedad Automotor dijo que adhiere al grabado de autopartes en todo el país, las compañías de seguro dijeron que es obligatorio y otras provincias también lo incorporaron", destacó respecto a la actividad.

Por otra parte, señalo que le hicieron invertir "un montón de plata en locales" y no le daban la obligatoriedad de la tarea. "¿Para qué está la ley? Yo no impuse esto, esto es una ley sancionada por la Unicameral de Córdoba, yo soy un agente que realiza lo que dice la ley", cuestionó.

Finalmente adelantó que hará las denuncias que corresponde porque está "a derecho" y "siempre dio la cara". "Soy titular de una empresa, acá nunca hubo testaferro, nunca tuve ningún problema", garantizó.

Según la investigación de la Provincia, la empresa habría desviado operaciones comerciales hacia la Cámara de Grabadores de Autopartes, con el presunto objetivo de evadir el pago de impuestos.

En relación a las actuaciones de Policía Fiscal, Grababus acumuló $21.213.375 de deuda por no abonar el Impuesto de Sellos en los períodos 2015 y 2016; de 2014 a 2017, por incumplir con el Impuesto a los Ingresos Brutos, la mora aumentó en $9.692.703; y por una deuda detectada de la Cámara de Autopartes de Vehículos, Automotores y Motovehículos respecto a Ingresos Brutos (períodos 2015/2017), sumó otros $12.143.635.

Entrevista de Miguel Clariá.